Our Own Way

29.-

El grupo de mandalorianos se despidió de Sabine y Ahsoka luego que ambas emprendieran un nuevo viaje en búsqueda del objeto que las ayudaría a encontrar la ubicación de Ezra.

—Lo lograrán—Murmuró Din mientras entraban en el hiperespacio para regresar al encubierto—Estoy seguro de eso.

Bo sonrió tras el casco y asintió, ella también esperaba que tuvieran éxito en aquella aventura, incluso, se había ofrecido a acompañarlas junto a Din y los otros, pero Ahsoka había insistido en que era algo que Sabine y ella tenían que hacer. —Lo sé.

Koska acarició la cabeza de Grogu mientras sentía la mirada de la chica de armadura roja perforarla. Ella no era una cobarde, pero esperaba que todo el encubierto no la tratara igual que la joven frente a ella. —¿Y a cuantas horas estamos de mi nueva casa? —Preguntó tratando de iniciar un nuevo tema de conversación.

—Aún estamos bastante lejos—Le respondió Bo-Katan mientras dejaba que el piloto automático se hiciera cargo—¿Tienes hambre, Kos?

—Un poco—Confesó Koska mientras se colocaba de pie y dejaba al niño verde sobre el asiento—¿Qué tienes en mente? —Preguntó.

—Tengo el clásico de clásicos, sopa pog—Se carcajeo suavemente mientras le hacía una seña para que la acompañara—Por cierto... Sabes sobre el ayuno, ¿verdad? —Bo-Katan abrió la puerta para salir al pequeño pasillo.

—¿Qué ayuno? —Preguntó Koska casi con voz de angustia mientras la seguía—No leí nada sobre ayuno. Dime por favor que...

Zaya soltó una risita al escuchar la preocupación en la voz de la mujer—Esto será bastante divertido. —murmuró a R5 desde su lugar.

Koska siseó hacia la dirección de la chica—Deja de burlarte de mí, fanática.

Zaya sonrió de oreja a oreja, pero no es como si Koska pudiera verla—Ahora tú también lo eres, Vod. —Había más burla en su voz.

Bo-Katan le dio un par de palmadas en su hombrera a Koska para que la siguiera, sabía que sería difícil para su amiga a acostumbrarse a ese nuevo tipo de vida, pero Bo, sabía que Koska se acostumbraría, los cambios eran buenos, bueno, en la gran mayoría.

—Ella me odia.

—Solo se está burlando de ti—Le respondió Bo-Katan mientras llegaban a la minúscula área reservada para cocinar—Me alegra que estés aquí, en verdad.

Koska sonrió tras su casco—A mí también, yo... lamento lo cruel que fui contigo.

—Solo hacías lo que creías que era correcto.

La mandaloriana suspiró—Estaba equivocada, pero ahora estoy aquí y me tienes que contar todo... absolutamente todo ¿De acuerdo? Quiero saber cómo pasaste de estar en tu castillo a vivir en la secta, digo...—Se corrigió rápidamente—A la tribu de Djarin.

—Es una historia bastante larga.

—Por suerte para ti, tengo mucho tiempo—Se burló Koska mientras ayudaba a preparar la comida—De mi parte, también es una historia bastante divertida.

—¿Cómo hiciste para... bueno, para escapar de Axe? No creo que él estuviera muy contento de que lo dejaras. —preguntó Bo-Katan también queriendo saber de cómo su amiga hizo para dejar a la flota.

Koska suspiró—Bueno... Axe no lo sabía.

Bo-Katan casi dejo caer el pequeño empaque con polvos deshidratados de la sopa pog—¿Qué? ¿Cómo que no sabía? ¿Qué hiciste, Koska? —Preguntó la mayor.

La mandaloriana mas joven respiró profundo antes de hablar—Después que te fuiste de Plazir-15, yo.... Estaba histérica, estaba tan molesta, Bo—Sus mejillas estaban rojas, Koska podía sentir el calor irradiar de ellas, por tercera vez, Koska agradeció tener el casco puesto—No podía creer que eligieras a Din Djarin sobre Mandalore, lo maldije varias veces e... hice un desastre, Axe estaba igual de molesto y le gritó a toda la flota tu decisión de quedarte con el niño de la guardia.