Realeza Azul |• KookMin

Capítulo Nueve

— ¿Cómo estuvo todo en mi ausencia?

— Todo en orden, el príncipe Jimin estuvo en la biblioteca la mayor parte del tiempo, bajó algunas veces al jardín y luego subió a su habitación, también fue al establo a ver a su caballo y alimentarlo. Aunque hoy recibió una visita.

— ¿Visita?

— El príncipe Taehyung llegó para el almuerzo. Ellos están ahora en la habitación del príncipe Jimin.

— Gracias por la información — asintió abriéndose paso con su caballo.

Al bajar uno de los guardias tomó su corcel para llevarlo de regreso a su establo, él solo entró al castillo siendo recibido por las sirvientas con una pequeña reverencia. Un suspiro escapó de sus labios mientras subía las escaleras a su habitación para descansar. Pero grande fue su sorpresa cuando al abrir la puerta se encontró a ambos Omegas sobre su cama teniendo una agradable conversación.
Tanto Jimin como Taehyung lo observaron.

— Su majestad — saludó a Taehyung con una reverencia.

— Príncipe — respondió al saludo de Jungkook mientras se ponía de pie para hacerle una reverencia.

— ¿Qué haces aún con vida?— preguntó seriamente Jimin sin moverse de la cama.

— No lo sé aún.

— Jimin— llamó su atención Taehyung.

— Lo siento, es que creí que tampoco vendrías hoy amorcito— sonrió — Pensé que quizás te habían emboscado los bandidos, ya sabes, que te hubieran amarrado, luego llevado a lo más profundo del bosque para torturarte hasta la muerte y dar tu cuerpo a los animales salvajes o quizás como mejor opción, haberlo tirado al lago— dijo fingiendo angustia.

— Dios nos libre de eso— negó de inmediato Taehyung sorprendido por las palabras del rubio.

— Si, Dios nos libre — sonrió Jimin sin quitar sus ojos de los de Jungkook.

— Para tu buena suerte amor, aún estoy con vida — le devolvió la sonrisa Jungkook — Algo en mi me dijo que debía vivir solo por tí…

— Ajá…

— Ahora, mi pregunta es — suspiró — ¿Qué hace su majestad en mi habitación?

— Oh, ¿no lo recuerdas mi lindo bulldog francés? — miró a Taehyung — Le dije al príncipe que no podía dormir en mi habitación asignada ya que me gustaba esta vista y él me concedió su habitación, ¿no es eso increíble Hyung?

— Si, lo es…— susurró.

Jungkook lo miró incrédulo con una increíbles ganas de estrangularlo con sus propias manos. Pero no pudo ejecutar tal acto al tener al príncipe Taehyung allí presente.

— Había olvidado ese hecho — sonrió — Lamentó las molestias, si me disculpan iré a mi habitación ahora — sonrió antes de salir de allí.

Soltando un suspiro cansado, camino por los pasillos hasta su habitación la que anteriormente había preparado para el Omega encontrando allí todas sus cosas incluído su hermoso retrató pintado a mano con óleos.

— Voy a matarlo — murmuró por lo bajo.

Solo tres días y ya lo había despachado sin su permiso de su propia habitación. Era increíble.

🍓🌼🍓

Pasar la noche con Taehyung fue increíble, el Omega no quiso ir a su habitación y Jimin le pidió dormir allí con él. Ambos hablaron mucho en toda la noche hasta que de un momento a otro el rubio se durmió.
Esa mañana al despertar no se encontró con Taehyung allí por lo que se vistió rápidamente y busco a Wheein quien tampoco se encontraba presente. Algo confundido se encaminó a la sala oyendo algunas risas que provenían de la cocina, lo cual llamó su atención.