Realeza Azul |• KookMin

Capítulo Veinte

Jimin miró al Alfa frente a él quien le sonrió amable, sorprendido se puso de pie sacudiendo su pantalón y lo observó mejor.

- Eun Woo.

- Veo que aún recuerda mi nombre, eso es bueno- llevó sus manos tras su espalda - Quiere decir que deje un abuela impresión.

- Nunca olvido la cara de mis prisioneros - dijo con burla y el alfa rió al recordarlo.

- Eso fue vergonzoso.

- No debiste hacerlo.

- Ya se lo dije, tenía curiosidad acerca de su belleza, la gente habla, los rumores corren y hacen sentir a los demás inquietos curiosos por descubrir si algo de sus locuras es cierta o no.

- ¿Lo fue para usted?

- Por supuesto que sí- asintió- Y lo sigue siendo aún aquí.

- No lo ví en mi boda.

- Si asistía me opondría - le sonrió pequeño- Me disculpó por mi atrevimiento, no debí decir eso- negó con su cabeza - ¿Le sorprendió oírlo?

Jimin suspiró y le dió la espalda observando nuevamente las rosas del jardín.

- No, todo alfa piensa de esa forma cuando ve algo que le resulta hermoso - susurro - No se trata de amor o algo por el estilo, es solo egoísmo.

- ¿Disculpe?

- Dicen que los piratas buscan su tesoro, navegan los siete mares por sus riquezas, pero cuando logran obtener el botín,¿cómo crees que se sienten?

- ¿Felices?

- Exactamente, pero su felicidad es momentánea, hay piratas y piratas, unos esconden nuevamente su tesoro para que nadie disfrute de él, solo ellos mismos, otros jamás se conforman y siguen buscando.

- ¿A dónde quiere llegar con todo esto?

- Si ves oro dirás que es lo más hermoso que tus ojos vieron alguna vez, halagas mi belleza cada vez que nos encontramos y dices que fue el motivo de tu curiosidad. ¿Debería sentirme halagado por algo tan superficial?- sonrió.

Eun Woo solo se maravilló, discretamente ese Omega acaba de ponerlo en su lugar. Cada encuentro con Park Jimin era así de sorprendente a sus ojos. Eso solo aumentaba su curiosidad con respecto al Omega.

- Hasta ahora, solo su belleza me cautivo, quizás es porque no he tenido la oportunidad de conocerlo mejor, me gustaría poder hacerlo si me lo permite- hizo una pequeña reverencia.

- ¿Qué lo trae aquí? - preguntó comenzando a caminar siendo seguido por el Alfa.

- He venido a entregar un mensaje de mi padre a su alteza.

- Ya veo... entonces pierdes su tiempo aqui.

- Todo lo contrario, no es un mensaje importante, puede esperar - sonrió y Jimin hizo lo mismo- Ahora solo me gustaría acompañar al príncipe en su paseo.

- ¿Por qué debería aceptar algo como eso?

- Porque por su aspecto, debe sentirse solo.

Sorprendido por sus palabras, Jimin lo observó con su ceño fruncido. ¿Tan obvio era todo?

- Ust-

- No voy a juzgar algo que no me corresponde, como dije, solo quiero y deseo acompañarlo. Mi compañía no es la mejor pero al menos es algo - se adelantó.

Sin dudarlo, Jimin lo siguió de inmediato con una pequeña sonrisa. A decir verdad le emocionaba hablar con alguien además de los sirvientes y Wheein.