Podía ver tus ojos en cada pantalla de la ciudad, escuchaba tu nombre ser mencionado por cada persona que pasaba a mi lado, mientras decían lo increíble que eras, y todo lo que estabas logrando al lado de los seis increíbles chicos más. Oía tu voz c...
📌PD: Espero que disfruten mucho del Capítulo. Las fallas ortográficas serán corregidas una vez que la novela entre en edición. Infinitas gracias por el apoyo y la paciencia.
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Narrador Omnisciente
Amira, quién había escuchado en silencio a Juwon, lo observa, sin pronunciar ni una sola palabra, mientras cada una de esas frases le hace resonar en su cabeza, llevándola al recuerdo momentáneo de aquel tiempo en donde aquello era una de sus mayores inseguridades, esos días en donde pasaba con el temor de que realmente Jungkook sintiera vergüenza de ella y no temor de que sus fans se enteraran qué tenía una relación de caso cinco años con una mujer anónima, fuera de su mundo, lejos de su altar. Esa secreta inseguridad que nunca pudo expresar abiertamente a Jungkook la había atormentado en el camino final de su relación, incluso impidiéndole dormir en ocasiones, pero justo después de enterarse de que ciertamente el mismo Jungkook era quien no quería revelarla, y terminar con él ante ese balde de realidad, Amira comenzó a creer de que ese era el motivo, lo pensaba en su estadía en Londres, y fue cuando el dolor aumento aún más, por ello, se negó a seguir recibiendo contacto de él, pues el dolor y la vergüenza no la dejaban, y estuvieron apuntó de nublar su juicio.
No obstante, en el camino de su sanación, tuvo la fortuna de inesperadamente tocar ese tema con su mentor, Eduard, quien no solo le dio otro balde de realidad, si no, que también le ayudó a despejar esa nube y hacerla entrar en razón, dejando como resultado final, luego de casi seis meses con esa herida en el corazón, un respiro de alivio, y en si, en verdadero inicio de su sanación, recuperación de seguridad, y especialmente, el verdadero perdón a Jungkook desde su corazón.
Le había costado muchas lágrimas, conversaciones y auto-terapia para comprender que ella era demasiado, era suficiente, y siempre lo sería, para quien sea, y a este punto, nadie la bajaría tan fácilmente de ahí, mucho menos permitiría qué un Don Nadie la quisiera herir con sus palabras "para ayudarla" o manchara la imagen de alguien a quien conocío durante cinco años lo suficiente como para saber perfectamente que él no era ese tipo de hombre, ni lo sería nunca.
—¿Supongo que ahora eres íntimo de Jungkook, no? —Amira contesta, en un tono tranquilo, algo totalmente fuera de lugar a lo que Juwon esperaba con angustia.
—¿Qué?...
—Tú no conoces a Jungkook, nunca has tratado con él, y como no lo has hecho, claramente no sabes una mierda sobre él. No puedo negar que en nuestra relación hubieron muchas cosas mal en su tramo final, pero puedo asegurarte con certeza qué sentirse avergonzado de mi, no era una de esas, no cuando di más de lo que él dió por mi, y no me refiero en lo material. Me tomó mucho tiempo entender que realmente estaba preocupado por muchas situaciones negativas que podían venir a nosotros, a su grupo y demás si nuestra relación se revelaba tan pronto, aunque eso no justifica sus acciones y la manera que llevó la situación que llego a herirme tanto, ahora que estoy con un pie adentro de este mundo, puedo ver que hay muchas cosas en juego, y que no todas las personas del medio tienen buenas intenciones. —Amira saca de nuevo la caja de cigarros, para tomar uno de su interior.
