11. 𝑭𝒂𝒏𝒕𝒂𝒔𝒎𝒂𝒔.
—Buen plan, Thomas —Minho habla. —, vamos a ver que tiene que decir, funcionó tu plan de maravilla
—Cierra la boca, Minho... tal vez pueda alcanzar la soga —Thomas se esfuerza por llegar a la cuerda que lo sostiene de los pies pero ni se acerca.
—¿Disfrutando de la vista? —Aparece Jorge.
—¿Qué quieres de nosotros? —Pregunta Thomas.
—Esa es la cuestión, mis hombres quieren venderlos de vuelta a Cruel, la vida los hizo conformistas, pero yo no soy así y algo me dice que tu tampoco lo eres
—¿Se me subió la sangre a la cabeza o este loco está diciendo tonterías? —Minho no sabe guardar silencio.
—Díganme lo que saben del brazo derecho —Pide Jorge.
—Que son fantasmas, un tal Jorge nos lo dijo, ¿te suena? —No sé por qué me quejo de Minho si soy igual, a veces desearía poder regresar el tiempo, o simplemente pensar antes de hablar.
—Yo creo en los fantasmas —Camina hacia mi. —, especialmente cuando los oigo hablar en las ondas de radio. —Se queda parado allí, mirándome seriamente mientras toma una palanca que hay a su lado. —Ustedes díganme lo que saben y podríamos hacer un trato
—Yo, amm... no sabemos mucho —Luego de las palabras de Thomas, mueve la palanca y siento que caigo al vacío pero pronto me detengo, todos gritamos.
—¡No, no!... ¡ya, ya, está bien!... —Thomas es el que le habla. —¡se ocultan en las montañas y atacaron a Cruel... y tienen a varios jóvenes , es todo lo que sabemos
—Oye, Jorge... —Aparece otra persona, un hombre. —¿qué ocurre?
—Mis amigos y yo nos estamos conociendo, eso es todo
—¡¿Y el trato?! —Le grito, aprovechando que está frente a mí.
—Tranquila, los llevaremos a donde pertenecen
Ambos hombres se retiran de la sala, dejándonos allí colgados.
—Que idiota —susurro.
—Tenemos que encontrar la manera de bajar de aquí —Dice Thomas.
—Thomas... si me empujan hacia la palanca, puedo moverla y bajarnos —Les susurro.
—Buena idea, Mai, chicos, ayúdenme
Estiro mi mano hacia Thomas y hacia Minho que son los que tengo más cerca, me toman y cuando me sueltan, comienzo a balancearme.
—Tienen que empujarme un poco más —Digo, intentando no marearme por la altura.
—Thomas, tienes que mover a Maia hacia aquí —Pide Minho.
—De acuerdo, intentémoslo una vez más —susurro.
Thomas me sujeta del brazo y me estira hacia él.
—¿Listo, Minho? —Pregunta Thomas antes de lanzarme.
—Si —Contesta en un susurro.
Mi hermano me empuja hacia el otro chico que me toma de la cintura con sus brazos.
—Empújala —Dice Thomas.
—Uno, dos... —Minho me empuja y alcanzo a sujetarme de la barandilla.
—¡Si! —Grito en un susurro.
—¡Maia, hazlo! —Grita Thomas.
Me doy la vuelta para quedar boca abajo y me estiro hacia la palanca, la tomo y la muevo un poco, alcanzo a llegar al suelo de esa planta, me desato la soga y voy a ayudar a los demás.
Una luz entra por las ventanas y se oye una voz familiar. Es Janson.
—Buenas noches, les habla el departamento de catástrofe y ruina universal, tenemos sus instalaciones completamente rodeadas, les informo que, involuntariamente, están en posesión de propiedad de Cruel, devuelvanlos intactos y lo tomaremos como un simple malentendido, pero si se resisten, todos y cada uno de ustedes, morirá, la llamarada acabará con los demás en cuestión de tiempo, la esperanza de una cura está en sus manos, la decisión es suya
Termino de desatar a Thomas y sigo con Chuck, ellos ayudan a los demás. Una vez que todos bajamos, nos reunimos en el centro.
—Hay que largarnos —Dice Thomas.
Vamos a echar a correr hacia la salida pero un hombre con un arma nos corta el paso.
—Hey, no queremos problemas, ¿si?, lo único que queremos es salir de aquí —susurra mi hermano, levantando las manos.
—¿Es en serio?... —El hombre levanta un Walkie. —Janson, los tengo conmigo, los voy a sacar, no nos disparen. —Se guarda la radio en el bolsillo de su chaqueta. —Caminen, ahora... ¡no están haciendo caso!
Thomas se lanza al arma y el hombre dispara, por suerte la bala sale disparada hacia el techo, ambos forcejean pero no logra quitarle el arma y nos vuelve a apuntar.
—¡Niño imbécil! —Grita el hombre.
Un disparo se oye y nos miramos entre si para ver si le dio a alguien. Pero no, el hombre cae a nuestros pies, la chica de cabello corto le disparó en la espalda.
—Okey, vengan... —La muchacha nos pide que la sigamos. —¡¿qué esperan?!, ¡corran!
Corremos por los pasillos de antes y subimos a la sala donde conocimos a Jorge. Él está allí.
—¡Brenda, rápido!, no hay mucho tiempo... ¡corran, corran!... justo por aquí —El hombre abre unas ventanas, un cable conecta esta sala con la del otro edificio, debajo hay una caída que lleva a la muerte segura.
—Esto debe ser una broma —susurra Sartén.
—¿Quieren llegar al brazo derecho?, yo los llevaré con ellos, pero me lo van a deber —Jorge toma una de las cuerdas y se lanza. —, ¡síganme!
—¡Listos, todos! —Brenda baja otra cuerda. —, ¡rápido!
—¡Todos háganle caso, ya!, los espero del otro lado —Grita mi hermano.
Thomas se lanza, lo sigue Minho y Sartén, luego de ellos van Newt y Aris. Brenda le da una cuerda a Teresa y otra a Chuck.
—No puedo —susurra el niño, mirando hacia abajo.
—¡Si puedes, Chuck, eres muy valiente! —Le doy un beso en la cabeza y lo acerco a la orilla. —, por favor no te sueltes, ¿entiendes?, Teresa ira detrás de tí y yo voy luego —El muchacho asiente y se lanza mientras grita. —, Teresa...
—Tranquila, lo vigilo —Me contesta asintiendo.
Teresa se lanza y Brenda se aleja de la ventana.
—¡¿Brenda, dónde vas?! —Corro detrás de la chica. La encuentro buscando algo en unos cajones. —, ¡¿qué estás buscando?!... ¡hay que irnos!
—¡Lo tengo! —Grita y levanta un objeto, perece metálico.
—¡Vamos, ya!
Intentamos volver hacia la ventana pero los de Cruel ya han entrado a esta sala. Brenda saca un arma y les dispara sin pensarlo dos veces.
—¡Corre, corre! —Me empuja hacia atrás. —,¡cúbrete!
Nos disparan mientras salimos de la sala, me agacho un poco pero sigo corriendo. Brenda me adelanta y la sigo por los pasillos.
—¡No te retrases, se nos agota el tiempo! —Grita sin girarse a ver si estoy allí.
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El Hilo Rojo: Maze Runner |Minho|
FanfictionFanfic de la trilogía 'El corredor del laberinto'.