Una historia en la cual Harry Potter tiene una hermana melliza, Dahlia. Al cumplir ambos once años reciben su carta de Hogwarts enterándose por primera vez sobre el mundo mágico y todo lo relacionado a lo que fue la vida de sus padres.
Dahlia Potter...
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CAPITULO 54: UNIÓN DE FAMILIAS
Dahlia Potter solía disfrutar un poco de las vacaciones, pero eso había sido antes de entrar a Hogwarts. Lugar dónde había conocido a sus amigos de la misma casa a la que ella pertenecía y se habían vuelto una parte importante en su vida.
Después de estar casi todo el año juntos entre risas y bromas, pasar las vacaciones sin ellos se sentía... aburrido y no solo eso, la relación con su hermano Harry no estaba bien.
Desde que habían entrado a la escuela se habían separado más y más, aunque Dahlia no lo consideraba por completo su culpa, su hermano era el mayor responsable en que estuvieran así.
A pesar de que Harry había intentado hablar con ella, pero no le había dado la oportunidad.
Durante la semana de vacaciones que había pasado, siempre intentaba acercarse intentando arreglar las cosas, pero ella se mantenía cerca de su tía Petunia tratando de ocuparse con deberes de la casa o con todas las tareas que les habían dejado los profesores para las vacaciones.
Su tarea favorita era la de pociones, clase que tenía con el profesor Snape.
—Lia... ¿Podemos hablar?
Dahlia giró apenas para mirar a su hermano mientras dejaba de escribir en su pergamino, regresó su mirada al papel frunciendo ligeramente el ceño.
—No. — dijo Dahlia de manera fría — Estoy ocupada ahora, Harry.
—¿Podemos hablar luego? — volvió a preguntar, intentando ganar una oportunidad.
—Tampoco, tengo que contestar algunas cartas. Ya te dije, estoy ocupada. — respondió del mismo modo frío que había adoptado desde que salieron de la estación del tren.
—Lia...
Dahlia suspiró cansada colocando el último punto en su tarea dejando a un lado la pluma, tomó las cartas que habían llegado de sus amigos y se levantó de la silla para salir de la habitación que compartía con su hermano en el segundo piso.
—Buenas tardes, cariño — saludó Petunia cuando la vio entrar a la cocina — Veo que tienes cartas ¿Tus amigos de la escuela?
Dahlia asintió mientras se sentaba en una de las sillas alrededor de la mesa y Petunia observó a su sobrina con curiosidad mientras se acercaba con un trozo de tarta de manzana que dejó frente a la pequeña pelirroja.
—Preparé esto, espero te guste — comentó Petunia con una pequeña sonrisa.
—Gracias, tía Petunia — murmuró Dahlia mientras revisaba las cartas.
Solo cuatro de sus amigos le habían escrito cartas esa vez: Blaise, Theo, Daphne y Pansy.
—¿Está todo bien, Lia? — preguntó Petunia mientras se sentaba a un lado suyo con un trozo de tarta.
