Una historia en la cual Harry Potter tiene una hermana melliza, Dahlia. Al cumplir ambos once años reciben su carta de Hogwarts enterándose por primera vez sobre el mundo mágico y todo lo relacionado a lo que fue la vida de sus padres.
Dahlia Potter...
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CAPITULO 43: EL DESPACHO DE DUMBLEDORE
La profesora McGonagall junto a los mellizos Potter dejaron la escalera de piedra y ella se encargó de llamar a la puerta. Esta se abrió silenciosamente y los tres entraron.
La profesora pidió a los niños que esperaran y los dejó solos.
— ¿Qué crees que nos digan? — preguntó Harry en voz baja mientras observaba el lugar.
Dahlia negó imitando a su hermano. El despacho de Dumbledore era algo interesante, si no tuvieran miedo de ser expulsados, tal vez habrían prestado más atención a los detalles de aquel lugar.
— Yo no sé qué es lo que les pasó, apenas me había alejado de Sophie y Celine cuando tropecé y me encontraste — explicó Dahlia a su hermano, en voz baja mientras esperaban.
—Yo venía de hablar con Hagrid — comentó Harry intentando aliviar el ambiente. — Justo quería hablar con el director sobre sus gallos... ¿Sabías que algo los está matando?
La mirada de la pelirroja fue a su hermano por unos segundos antes de negar con la cabeza, de algún modo hablar con su hermano se sentía...raro.
Dahlia pasó la mirada por la pared cubierta de retratos de antiguos directores mientras llevaba sus manos a un mechón de su cabello, jugando con este tratando de calmarse.
—Mira... — dijo Harry — es el sombrero seleccionador.
Harry dudó un segundo. No sabía si debía hacerlo o no, pero su curiosidad era mayor. Se acercó al escritorio sigilosamente ante la mirada de su hermana y los retratos.
—Harry... ¿Qué haces? — preguntó Dahlia en voz baja. — Ya no debemos meternos en más problemas.
Harry agarró el sombrero y se lo colocó en la cabeza. No pasó mucho tiempo en el que Dahlia notó como su hermano se lo quitaba como si hubiera escuchado algo que no quería y lo dejaba con cuidado en el mismo lugar.
