Un tímido y sutil ruido interrumpía el silencio del día. Un ruido infantil y triste.
Frunciendo el ceño, la joven prestó atención al aire que traía y llevaba los ruidos y alcanzó a percibir de dónde provenían los ruidos.
Un suave y triste llanto emitía un niño cerca de donde ella estaba, pensando en que nadie lo escucharía.
_____ tomó la iniciativa y fue en busca del menor. Había tomado unos minutos de más en encontrarlo, y para cuando lo había visto, este ni tenía ni idea de que hacer.
Su brazo sangraba a medida que pasaban los segundos y el niño lloriqueaba sin saber como detener el sangrado.
—Hey, calma, calma, yo puedo ayudarte —dijo queriendo captar su atención para que no siguiera alterándose.
—Me duele mucho —lloró mientras apretaba su brazo por el pánico que sentía.
La joven intentó pensar en algo que lo ayudara y recordó algo, había una planta especial que se le solía darle uso en ocasiones para ponerlo sobre alguna herida.
Ella tomó al niño y lo cargo entre sus brazos al estilo nupcial y caminó recordando dónde había sido la última vez que había visto aquella planta.
Viéndola de reojo la notó y dejando al niño en el suelo de manera delicada. Sacó un pequeño cuchillo que solía guardarla con ella y cortó la planta, hasta que tuviera una fina capa de ella y la aplicara sobre al herida.
Pero el ardor obligó al niño a moverse y ahora quería evitar de todas las maneras posibles el contacto con aquella planta.
—Quédate quieto —pidió _____. Pero el niño no hacía caso hasta que ella agarró su brazo pintado de sangre y trató de mantenerlo quieto para curarlo.
Sus manos quedaron pintadas de rojo cuando finalmente había podido aplicarla la planta sanadora. Pero no había sido lo suficiente como para seguir deteniéndose el sangrado.
_____ pensó rápido en que hacer y de manera sorprendente reunió sus fuerzas y rasgó una parte baja de su blusa y con el retazo de tela comenzó a envolverlo sobre la herida para evitar la falta de sangre.
Ahora un poco más calmado. Volvió a cargarlo y ahora lo llevaba a su pequeña tienda para dejarlo en su cama. Durante el camino, le había preguntado qué fue lo que había sucedido.
—No sé cómo, pero solo veía las nubes cuando una flecha aterrizó en mi brazo... Me había asustado mucho que la arrebaté de mi brazo pero eso lo empeoró —dijo entre sollozos—- Gracias...
_____ se detuvo al escucharlo, hacia mucho que no le agradecían. El niño quedó confundido e iba a disculparse, pues había pensado que ella se burlaría de él como los de demás niños.
Pero ella solo le sonrió de una manera dulce—. De nada, aquí estaré para ayudarte.
(...)
—¿Qué fue lo que pasó?
—¿Ella le hizo eso?
—Pobre niño...
Eran unos de los murmurios que alcanzó a escuchar ella mientras pasaba caminando entre los chicos y otra vez volvía a salir de ahí
Sus manos pintadas de sangre, la ropa igual y rota. Era una mala y rara imagen de ella en ese momento.
(...)
Frotaba sus manos en la cristalina agua del lago para limpiarse las manos, borrando la sangre de sus manos y dejando su piel limpia. Aunque su ropa seguía sucia y rota.
ESTÁS LEYENDO
Dejarlo todo por amor (Peter Pan y Tú)
FanfictionTodos critican esa unión entre ellos, no quieren que ella este con un cruel villano. Un simple hechizo de amor le hace creer que él la ama, sus ojos están vendados con tal de que no vea sus malas intenciones. Pero un despampanante sentimiento surge...