POR CONQUISTARTE

Capítulo 14

Capítulo 14

Un suave roce... Que sorprendió a Victoria, pero que le gustó...

Era el primer beso que se daban estando completamente solos... Y no necesitaban decir nada.

H: gracias...

V: vamos a desayunar...

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La idea de Victoria era trabajar en algunos contratos que le llevaron de la oficina, pero no lograba concentrarse...

Y todo gracias al beso que Heriberto le había dado...

Cerró los ojos y lo imaginó frente a ella... Besándola... Podía hasta respirar su perfume, ya lo tenía grabado en su subconsciente...

Entonces creyó estarse volviendo loca... Parecía una adolescente soñando con un beso... Hasta se tocó los labios, como si así pudiera recordar el beso...

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Mientras que recostado en la cama, a Heriberto le pasaba igual... Sonrió porque aunque el beso había sido corto, le pareció que Victoria le respondió, y obviamente no lo había apartado... Ni reprochado, ni prohibido que lo volviera a hacer...

Y eso era un excelente inicio... ¿Estaría alucinando o le parecía que Victoria lo miraba diferente...?

El acercamiento también podía ser por el accidente... Pero él deseaba con todo su corazón que fuera algo más que preocupación...

-Estudio de Victoria-

El teléfono la sacó de sus pensamientos...

V: bueno...

Es: hija, ¿cómo está Heriberto...? ¿Cómo estás tú...?

V: mucho mejor, pero preocupado...

Es: ¿por qué...?

V: teme que le quede una lesión que le impida seguir con su profesión...

Es: es normal que tenga miedos... Como todos... Deberías acompañarlo al médico...

V: claro que iré con él...

Es: ¿y cómo va el acercamiento entre ustedes...?

V: bien, mamá...

Tan bien, que ya no les resultaba extraño estar juntos... Empezaban a disfrutarlo... Y ella tenía que ir a ver si seguía dormido o necesitaba algo.

Pasó antes por la cocina y se encontró a las personas del servicio admirar un arreglo de rosas.

V: ¿y esas rosas...?

To: el doctor me pidió que las fuera a comprar, señora... Para usted...

Victoria sonrió... ¿cómo no le podía gustar un gesto así...?

Fue hasta la habitación principal y se sentó en la cama, a observarlo cómo dormía...

Y le causó tanta ternura verlo despertar... Además del color de sus ojos, sus pestañas y sus cejas le gustaban...

Hizo una especie de puchero, como si fuera un bebé, lo que la hizo sonreír... Y abrió los ojos lentamente...

H: Victoria...

V: ¿quieres comer ya...?

H: ¿ya es hora...?

V: sí...

H: dormí mucho entonces...

V: un par de horas... ¿cómo va el dolor...?

H: no es tan intenso... Vamos a comer...