¡𝗵𝗼𝗹𝗮, 𝗺𝗮𝗺𝗮́. 𝘁𝗲𝗻𝗴𝗼 𝘂𝗻 𝗻𝘂𝗲𝘃𝗼 𝗽𝗮𝗽𝗮́!

capitulo treinta y cinco

DESPUÉS DE UNAS HORAS DE VUELO, COMENZÓ a recibir miradas de confusión del resto de los pasajeros.

Durante el recorrido, se había convertido en niño una vez más, por lo que su ropa le quedaba muy grande para su cuerpo de niño. Pero Hirving no tenía los ánimos para preocuparse por eso ahorita.

Cuando el avión finalmente aterriza, después de demasiadas horas de vuelo se estira para no entumirse y escucha como truenan sus huesos ligeramente.

Incluso, hasta que se allá ajustado su cinto lo más que se pudiera, sus pantalones aún me quedaban grandes por lo que debía sujetarlos con la mano para que no se le cayeran.

Tarda en lograr encontrar un taxi que lo lleve a la casa de su Nana, y aunque le cobrarán de más porque el taxista no lo hacia oendejo por ser un niño que viajaba solo, a Hirving sigue sin importarle.

Es como si hubiera perdido toda la motivación, que todo dejo de importarle.

¿Si se quedaba como un niño para siempre? Bueno, podría hacer su carrera desde cero y volver a debutar.

Le iría muy bien regresando a la escuela primaria, finalmente obtendría los diplomas que jamás logro por buenas calificaciones.

Podría aprender más idiomas, tendría más tiempo.

Pero eso significaría olvidar por completo su vida, nadie sabría que le pasó, sería como si hubiera desaparecido.

— Carajo, ¿Y si me mato?

No tendría que verse en la situación de colarse a la casa de su abuela por una ventana para no encontrarse a su tía.

Había pensado en regresar a la casa de Memo y meterse como si de un ladrón se tratase, aprovecharía que estaría sola la casa para llorar todo lo que quisiera. Pero no quería ver tanto a Memo como a Diego porque eran quienes más le hacían recordar su situación.

Se deja caer en su cama mientras escucha la televisión de la sala.

¿Hasta cuándo se iría su tía? Estaba desesperado por tomar una ducha, odiaba viajar en avión.

Inevitablemente, se queda dormido a los minutos, el cansancio finalmente lo había alcanzado.

⚽

Abre los ojos lentamente cuando siente su teléfono vibrar de las notificaciones que le llegaban.

Se sentía incómodo por haberse dormido. Tenía hambre, estaba sudado y muy desorientado.

chamaco miado
Chucky
11:56 p.m.

chamaco miado
¿Dónde estás?
11:56 p.m.

chamaco miado
No me ignores
12:00 a.m.

chamaco miado
Pendejo
12:01 a.m.

chamaco miado
Te voy a spamear hasta que me respondas
12:02 a.m.

chamaco miado
H
12:02 a.m.

chamaco miado
I
12:02 a.m.

chamaco miado
R
12:03 .m.

chamaco miado
V
12:03 a.m.

chamaco miado
I
12:03 a.m.

chamaco miado
N
12:03 a.m.

chamaco miado
G
12:03 a.m.