capitulo diez

1.4K 232 93
                                    

[⚽]

Viernes 4 de Noviembre, 2022

Ya eran las nueves de la noche cuando Hirving decide terminar con su entrenamiento. Había pedido un Uber y este ya estaba esperándolo fuera de la cancha.

— ¿Hirving?.— el nombrado asiente.

— Buenas noches.— saluda.

Realmente estaba muy cansado, por lo que todo el camino, Hirving se la paso con los ojos cerrados.

Afortunadamente el conductor había notado su cansancio porque no había intentado hacerle platica.

— Gracias.— dice Hirving, cerrando la puerta del carro detrás de él una vez que se bajó.

El auto arranca en cuanto Hirving se baja y este comienza a caminar para la entrada de la casa de Memo.

Se detiene momentáneamente, suspirando con cansancio. Lo único que quería hacer al llegar era dormir, pero todavía tenía que comer y bañarse.

Cierra los ojos con fuerza y se toca la frente cuando comienza a dolerle la cabeza.

Cuando los abre, de repente todo se pone negro.

Hirving no lograba ver nada, las luces que estaban encendidas parecían como si se hubieran apagado.

Gira en el mismo lugar con confusión, se sentía extraño.

Quizás solo estaba alucinando.

Mira hacía enfrente donde se supone que está la casa de Memo, tan solo le faltaban unos pasos para llegar al patio. Pero no lograba ver las rejas y era como si solo hubiera un espacio vacío.

Es como si todo a su alrededor se hubiera desvanecido.

De repente, una luz a su izquierda se enciende, lo que sobresalta a Hirving, la luz no iluminaba lo suficiente y lo único que se veía era debajo del foro de luz. Pero lograba captar a una persona para debajo de la luz, parecía como si esa persona lo estuviera observando.

Cuando pestañea una vez más, todo vuelve a como estaba antes, incluso un coche pasa justo detrás de él y un grupo de adolescentes caminaba no muy lejos de él.

Frunce el ceño una vez más, pero suspira.

— Solo es el cansancio.— dice, restándole importancia.








[⚽]






A QUE NO SE LO ESPERABAN, EH.— DICE DIEGO.

— Hola.— susurra Hirving, sacudiendo la mano como saludo.

— ¿Quién es ese niño?.— pregunta Edson mientras Luis se acerca a ellos.

— Hola, ¿Cómo te llamas?.— le pregunta Luis, doblando las rodillas para quedar a la altura de Hirving.

— Hirving.— dice.

— ¿Por qué de repente tan tímido mi Hirving?.— pregunta Diego a su lado, sacudiendole la cabeza.

— Oh, te llamas igual que nuestro amigo.— alguien dice.

¡𝗵𝗼𝗹𝗮, 𝗺𝗮𝗺𝗮́. 𝘁𝗲𝗻𝗴𝗼 𝘂𝗻 𝗻𝘂𝗲𝘃𝗼 𝗽𝗮𝗽𝗮́!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora