Todo había terminado.
Todo lo que habían luchado y todo lo que se habían sacrificado, por fin daba frutos.Ahora todo volvería a ser como antes...cierto?
Bueno, más o menos.
Después de vencer a Shedder, la pareja de la chica y la tortuga era distante entre si.Leonardo ahora se encontraba en la guarida secreta de las alcantarillas, pensando en como podía hacer ver a Danae que realmente está arrepentido de lo que había pasado en la feria.
En eso, Mikey, aparece con Su rostro iluminado por una mezcla de emoción y preocupación.
¡Leo! ¡Finalmente terminamos con Shredder! ¿Por qué no estás celebrando con nosotros en la superficie? - exclamó Mikey, con su característico entusiasmo.
Leonardo suspiró y miró a su hermano con seriedad.
- Ahora no, estoy intentando pensar algo para poder arreglar las cosas con Danae...
Su hermano se sentó a su lado.
- ¿Pero qué pasó en la feria, Leo? Nunca vi a Danae tan molesta contigo. - preguntó Mikey, intentando entender la situación.
Leonardo bajó la mirada, sintiendo el peso de sus acciones.-Cometí errores, Mikey. No supe respetar su espacio y confianza. Ahora tengo que enmendarlo. - admitió, reconociendo sus fallos.
Mikey asintió con comprensión, colocando una mano reconfortante en el hombro de su hermano.-Estoy seguro de que podrás arreglar las cosas, Leo. Solo sé honesto y dile lo que sientes! No lo sé...hazle un poema?
Leo lo miró serio.
- Ugh, Mikey, sabes bien que eso no se me da bien...
Mikey sonrió, dándole un suave golpe en el hombro.
- Relájate, Leo. No necesitas ser un poeta. Solo dile lo que sientes de corazón. Hazle algo bonito, algo que demuestre que realmente te importa y que estás dispuesto a cambiar. A veces, las acciones hablan más fuerte que las palabras.
Leonardo asintió, agradeciendo el consejo de su hermano menor. Se levantó, decidido a encontrar la manera de reparar la relación con Danae.
Por otro lado, la antes nombrada se encontraba en la penumbra de la habitación, con el crepúsculo pintando tonos cálidos sobre los rascacielos de Nueva York. La sutil luz que se filtraba a través de la ventana revelaba los destellos dorados de su cabello rizado mientras contemplaba el horizonte.
El lagarto de su madre, Linda, descansaba plácidamente en su regazo, respondiendo con chirridos suaves a las caricias de Danae. La conexión entre ambas era palpable, como si Linda pudiera percibir la turbulencia interna de su dueña y ofrecer consuelo en silencio.
La brisa fresca del atardecer jugueteaba con los mechones de Danae, llevándose consigo sus pensamientos tumultuosos. La ciudad, que había sido testigo de eventos extraordinarios con las tortugas ninja y Shredder, se extendía ante ella, teñida de luces parpadeantes y sombras misteriosas.
En la quietud de la habitación, Danae reflexionaba sobre los recientes acontecimientos. La batalla contra Shredder, las tensiones con Leonardo y la necesidad de encontrar su propio equilibrio en medio del caos. Linda, como una compañera silenciosa, le ofrecía un respiro y consuelo en ese momento de introspección.
Mientras el sol se despedía en el horizonte, Danae sintió la calidez de Linda deslizándose en su regazo, quedándose dormida. La paz que emanaba del pequeño lagarto se convirtió en un bálsamo para el alma intranquila de Danae.
En ese momento un melódico sonido de guitarra se filtró en la habitación. Ella dejó a Linda descansando en el suelo y se acercó al balcón con curiosidad.
ESTÁS LEYENDO
Trazando Acordes Del Corazón (Rise!Leo x Reader)
Random❀.•° ✿.•° ❀.•° ✿.•°•.✿ °•.❀ °•.✿ °•.❀ En las sombras de un pasado doloroso, ella, un ángel con alas cortadas, sigue el destino marcado por su familia. Un encuentro inesperado con un chico la lleva por un camino inexplorado, donde descubre la verdade...