VII

41.3K 2.5K 236
                                    

En un mundo donde todos son anormales, yo prefiero ser normal.

—Elliot Cassanova.

 
Narrado por Elliot:

    Neta que si me la he rifado. Este día ha sido uno de los peores. Encima de que mato a un grupo de hombres, discuto con Victoria, me escapo para no tener que verla por varias horas, su hermosa hija me salta con tremenda sorpresa.

    Si no he quedado loco, asustado, nervioso, sorprendido y no sé que cosa más, me pueden llamar mentiroso.

    Pero es que no sé de dónde esa niña sacó las agallas para hacer lo que hizo. Y es que aún sigo tirado en el suelo por la única razón de que no sé cómo reaccionar.

    —¿Por–qué hiciste eso? —le pregunto a la niña.

    Ella abre sus ojos grandemente y no respondiendome busca la mirada de su mamá. Cuando levanto mi rostro para mira a Victoria, observo que ella tiene las dos manos en su boca sorprendida.

    —No tengo palabras para disculparme, Jefe. —comenta Victoria rápidamente agarrando a su hija por una de sus manos y acercandola a ella.

    —Mami, pero no hice nada malo. —dice la niña mirando a su madre con los ojos cristalizados—. Tú siempre lo haces. Tú siempre besas esa foto y le enseñé eso a papá. —comenta la niña haciendo un berrinche.

    Victoria abre los ojos de par en par, ya que su hija está dejando más que obvia la situación.

    —Él no es tu papá. Tú papá murió. —le dice Victoria sin una pizca de remordimiento.—. No sigas hablando de lo que hago o no hago.

    Cuando escucho las palabras que ella utiliza para dirigirse a su hija, me encabrono y mucho.

   La niña empieza a llorar y al hacer esto veo que se agarra el pecho.

    Esas palabras debieron de haber entrado muy duro en su pequeño corazón. Decirle tan secamente a una niña de 5 años que su padre murió, es lo más inhumano que he visto.

    La niña se gira hacia mi, entonces abriendo sus brazos, corre hacia donde estoy para abrazarme con ellos.

   No me demoro en aceptar su abrazo. La rodeo con mis largos brazos y la cargo en los míos.

    —Ya no llores. Las niñas que lloran se ponen feas y tu eres muy hermosa. —expreso queriendo que deje de llorar.

    —No tengo papá, estoy muy triste por eso. —dice ella bajando su cabeza y limpiándose las lágrimas que caen por su mejilla.

    Dios. Esto duele. Ver a una niña la cuál estaba sonriente hace varios segundos, estar triste ahora, me destroza el corazón.

    Acaricio su cabello rizado y sin pensarlo dos veces, le doy un beso en la frente.

    —Si quieres puedo ser tu papá. —le sonrío—. Por mi no hay problemas.

   Victoria hace amagos de decir algo, pero le hago señas de que se calle.

    —No, ella no tendrá otro papá. Ya tiene a su mamá y a su abuela, no necesita a nadie más en su vida. —expresa enojada queriendo desautorizar lo que he propuesto a su hija y aunque ella puede hacer lo que desee porque es su hija, de igual forma no está bien.

    Sin embargo; no discutiré con ella delante de su hija porque esto podría causarle trauma.

     —¿Pueden esperarme tú y tú abuela allá fuera, por favor? —le pregunto a la niña la cual asiente sonriente. Ya que está actuando como lo hacia hace varios segundos.

IMPERIO CASSANOVA© (2 LIBRO DE LA BILOGIA IMPERIO) [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora