Volveré a ti

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Bianca

—Lamento decir que esto no podrás evitarlo hermano — contraataca Zack —Ella me prometió su mano, hicimos un trato

—¡Entonces rompe el trato! — demanda Malek viéndome a mi —No me puedes hacer esto.

—Malek- — intento buscar mis palabras pero no puedo decir nada sin arriesgarme.

—Nada, ella se casará conmigo y punto. Sabrás aprender a perder por una maldita vez — se mete entre Malek y yo alejándome de el y tomando mi mano lo que lo hace enfurecer. Malek no duda en tomar su arma y apuntar, su hermano mayor sonría a la vez que aprieta su agarre en mi mano casi demasiado fuerte lo que provoca que haga una mueca pero me trago un quejido —Sabia que serias un mal perdedor — se burla.

—Jodete — Malek dispara aun lado de este en forma de advertencia.

Todo cambia en milisegundos, soy empujada hacia atrás a lo que ellos se tiran encima del otra, logro ver que el arma de Malek cae lejos de ellos, intercambian varios golpes. Me levanto queriendo hacer algo al respecto pero se que meterme entre ellos resultara peor. Decido que mi mejor opción será ir por el arma y detener este teatro. Lo que me toma correr al arma, Zack debió sacar la suya y no le tembló el pulso. Escuché el disparo y sentí todas las células de mi cuerpo erizarse. Escuché si quejido y tenía mucho miedo de ver pero al momento que vi la sangre sabia que todo se fue al carajo.

—¡Malek! — me apresuro a arrodillarme junto a él, no tengo tiempo para auxiliarlo cuando Zack me toma alejándome. Es ahí que a modo reflejo ya lo que golpeado con el arma en mi mano tres veces dejándolo caer inconsciente. Mi rabia que se había elevado de un subidón baja de la misma manera mientras vuelvo al lado de rulitos.

—Maldición estas perdiendo demasiada sangre — me quejo a la vez que rompo su camisa dejando ver el agujero sangrante en sus abdominales —Eres un idiota

—Que me estes insultando es una buena señal que no me has superado

—Cállate

Toma todo mi control el no querer romperme en preocupación, el no quedar congelada obligandome a actuar, evitando su ver su rostro en todo momento porque eso me debilitara. Con un pedazo de su camisa aplico presión en su herida provocando que se queje pero no me importa, el idiota debió haberme escuchado.

—Te vez molesta conmigo.

—Claro que estoy molesta, terminaste herido.

—Ahora creo que me entiendes — dice y sus palabras llegan directo a mi pecho a lo que tomo una larga respiración. Tiene razón, el me ha visto peor incluso pero no sé cómo explicarle que debía hacerlo, yo lo veo así se que el no. Continúo cubriendo su herida intentando detener la hemorragia mientras busco si celular en sus pantalones —Si quieres manosearme en este momento amore primero pide mi consentimiento.

—Cállate — repito pulsando la llamada a Izak quien no tarda en contestar, estoy molesta con el también por haberse ido demasiado lejos para no escuchar el disparo y venir corriendo aquí, tampoco creo hubiera podido hacer mucho.

—¿Hola?

—Vuelve aquí enseguida — es lo único que digo antes de colgarle. Calculo tardara un par de minutos a lo que decido quedarme un minuto mas antes de irme. Debo llevarme al maldito hermano mayor de este trillo de patanes para evitar que se sigan matando. Me atrevo a verle el rostro a rulitos y se ve pálido aunque sigue viéndome con ternura en sus ojos. Sus labios tornándose pálidos y eso me preocupan de más.

—Todo va a estar bien lo prometo — digo esforzándome en que mi voz no tiemble.

—¿Lo dices por mi herida o por ese ridículo plan que parecer tener con mi hermano?

EscorpionesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora