DENNA:
Habían pasado ya casi dos semanas. Dos semanas de aquel fatídico día, dos semanas sin Violeta, sin besar sus labios, sin aspirar su dulce aroma.
Denna se encontraba en su pueblo. En Ogijares, al lado de la montaña, había pasado varios días con sus amigos, intentando borrar todos los recuerdos que había dejado Violeta, pero ni con tantos seres queridos, había podido olvidar a la pelirroja.
Le daba miedo el día del rencuentro, el día que la tuviese delante y no pudiera darle la mano, para desaparecer y recorrer cada centímetro de su piel. El día en el que la mirase como una auténtica desconocida, como si ella nunca hubiese pasado por su vida, como si nunca hubiese luchado por ella.
Ya no tendría la oportunidad de decirle que la amaba, Violeta seguramente, habría hecho las paces con su novia, y habría vuelto a ser feliz, olvidándola por completo. Pero Denna no podía, el sentimiento de culpa que tenía porque creía haber acabado con lo más especial que le había pasado en la vida, era demoledor. A cada paso que daba, recordaba que había sido su culpa. Y como no se lo había dicho a nadie, nadie sabía que ella por dentro se sentía como la mierda.
El día siguiente era la gala 0, y para intentar despejarse, había estado desde las 8 de la mañana hasta las 8 metida en el estudio. Ensayando, practicando, pues aunque tenía el corazón roto, quería cumplir su sueño, quería entrar a OT, entraría con o sin Violeta ahí estaba la clave. Ella de primeras quería que Violeta no entrase, pero después se acordaba de lo duro que había trabajado para hacerse un hueco y se arrepentía de sus pensamientos. Además una parte de Denna soñaba con el día en el que se reconciliaran, el día en el que Violeta le dijera que ella también la amaba.
-Denna- dijo una voz. Era su hermana, Laura, una adolescente de 14 años, morena y con ojos verdes, que había estado de apoyo de Denna desde el principio. -¿Qué pasa?- dijo cuando vio a su hermana llorar.
-Nada, nada, estoy bien-
Laura se acercó an ella y la abrazó con fuerza. Denna se dejó abrazar, lo necesitaba, necesitaba alguien que la comprendiese, alguien a quien contarle todo lo que había vivido las últimas semanas, la pasión de el comienzo y el calvario del final. Todo, necesitaba desahogarse, soltarlo todo, y en ese momento su hermana estaba ahí para ella.
-Laura...-
-Cuéntamelo todo, estoy aquí- dijo apartándole las lágrimas.
Denna respiró aliviada, y se preparó para contarle todo lo vivido. Denna se lo contó todo, absolutamente todo, no se dejó nada por relatar, ni siquiera los momentos más íntimos.
-Has sufrido Denna, mucho, si no lo ha entendido significa que no te merece-
-Eso es lo que quiero pensar, pero luego me pongo a recordar, y pienso que no pudo ser solo atracción, no es posible-
-Denna, hay personas que no tienen corazón-
-Se que puede parecer que ella no lo tenga, pero no es verdad, sí que lo tiene, lo sé-
-¿Cómo lo sabes?- preguntó Laura secándole las lágrimas nuevamente.
-N-no lo sé- tartamudeó ella. -Pero algo me dice que sí que lo tiene-
-Te ha hecho daño Denna, ¿no lo ves?-
-Y yo a ella, por eso digo que tiene corazón, porque yo también la he herido-
Laura se dio la vuelta, y trajo consigo un pañuelo.
-O dejas de llorar o inundas la casa- dijo con sarcasmo.
Denna sonrió levemente, recordando cuando Violeta la hacía reírse hasta morir, cuando sus chistes le provocaban dolor de tripa.
-Me da miedo cuando la vuelva a ver-
-Igual deberías probar tu también lo del "sin corazón"- dijo su hermana.
-Igual, pero yo no soy así, yo lo que más quiero en el mundo es volver a estar con ella, respirar el mismo aire, caminar por el mismo sendero, lo quiero todo con ella-
-Eso ya es decisión tuya, pero me alegro de que quieras ser mejor que ella, que seas mejor que eso-
Laura abrazó a su hermana por última vez antes de marcharse.
-Recuerda que tu gente también te quiere Denna-
Denna asintió, sabía que su familia estaría ahí cuando se rompiera en mil pedazos, pero anhelaba que fuese Violeta la que recogiese sus pedazos.
VIOLETA:
Violeta estaba sentada, frente al mar, con el atardecer como única compañía, y con su altavoz de fiel escudero. "Lo que queda de mi" de Iñigo Quintero sonaba de fondo, era una de las canciones favoritas de Violeta, le recordaba a su abuela, pero ahora al escuchar cada verso solo podía pensar en una sola persona.
Denna había ocupado todos sus pensamientos desde hacía dos semanas, desde que le había dicho que nunca era nunca. Desde ese entonces había terminado con su novia, había roto con Julia, que para sorpresa de Violeta se lo había tomado muy bien. No había vuelto a hablar con ella, si ese era el requisito para volver a Denna, lo cumpliría con toda su voluntad.
Estaba sola, su familia estaba con ella, pero se sentía como una completa desconocida cuando estaba con ellos. Estaba vacía sin nada que aportar. Había perdido las ganas de comer, de hablar, de reír, de vivir. Su única esperanza era que Denna la perdonase, pero Violeta no tenía el valor necesario, no era lo suficientemente fuerte como para volver a mirarla y decirle que se había equivocado y que la amaba más que a cualquier otra en el mundo.
Se concentró en escuchar la música y contemplar las suaves olas del mar, a medida que pasaba cada ola, el atardecer avanzaba, y lo que era un naranja cálido se tornaba morado con el paso del tiempo. Necesitaba estar sola, debía sacar el valor de donde no lo había para volver con su razón de ser. Y eso solo lo podía hacer ella, solo Violeta Hódar podía hacer que Denna la perdonase, y eso ella lo sabía, la cuestión mayor era el valor.
-No sé que es lo que queda de mi- murmuró a la vez que la canción. Mañana estaría cara a cara con ella, y por la noche estaría cara a cara también, pero con su destino. Había trabajado durísimo para ese momento, y sabía que no sería fácil, pero debía confiar en gustar a él jurado, y sobretodo gustar al público.
Se marchó de la playa, directa a su casa, a practicar, a ensayar nuevamente la canción que cantaría en la gala 0, "Crazy" de Patsy Cline, una de sus canciones favoritas.
Estuvo ensayando hasta altas horas de la noche, se fue a dormir a la 1, agotada, pero satisfecha con el trabajo que había realizado y consciente de que el día siguiente se decidiría su futuro. Su futuro por doble, pues no sabía cuando implorar a Denna su perdón. "Primero debo sacar valor, y no lo tengo"- pensó la pelirroja, tumbada en su cama.
Mañana sería EL día, y estaba preparada para darlo todo y pasar de una vez a la academia con la que llevaba soñando más de 5 años. No habría nada que se lo impidiera.
Y por lo de Denna, sacaría el valor necesario y nunca volvería a darle la espalda, nunca es nunca.

ESTÁS LEYENDO
VIOLENNA
רומנטיקהVioleta es una joven granadina que se prepara para el casting de OT 2023, y espera ser seleccionada para ir a la academia y cumplir su sueño, triunfar en el programa e iniciar una carrera internacional y de éxito. Mientras Denna, es otra joven grana...