VIOLETA:
Hacía una tarde espectacular. El sol se estaba poniendo cuando acabó de engullir el último bocado del bocadillo de jamón serrano que les habían preparado.
-Violeta, ¡más despacio!- dijo, con un fuerte acento de Galicia.
-¡Joder Miriam que tengo hambre!- protestó la pelirroja después de lanzarle una sonrisa pícara a la gallega.
Miriam Rodríguez se encontraba sentada delante de ella. Su pelo moreno, antes rubio, relucía bajo la luz del atardecer de Granada, sus rizos, ahora mucho más ondulados trazaban bonitas espirales. Y sus ojos marrones brillaban debido a las risas que se estaba echando.
-Bueno, si te atragantas no es mi culpa, eh- dijo entre risas al mismo tiempo que bebía de su copa de vino blanco.
-No me voy a atragantar tonta- murmuró haciendo una mueca.
-Iré llamando a la ambulancia- se rió.
Violeta también se rió. Dios, llevaba mucho tiempo deseando poder sentirse así. Así de libre, libre de responsabilidades, sin cámaras a su alrededor, sin micros que captaran todos sus susurros..., se sentía libre.
Por eso, lo primero que había hecho después de salir del hospital había sido ir a visitar a Miriam, su "partner in crime", como diría ella.
-Yo tendré que llamar al zoo, leona- dijo Violeta, limpiándose la boca con la servilleta. Intentó no reírse, pero la mirada que le lanzó la gallega le hizo empezar a mofarse. La gente las miraba raro, pero nadie hacía preguntas porque estaban en uno de los restaurantes favoritos de Miriam. Uno con tres estrellas Michelin, y con platos de hasta 117 euros.
Ah si. Miriam era millonaria. Mejor que millonaria, era multimillonaria. Sus padres eran unos ricos empresarios, que trabajaban en el mundo del séptimo arte, es decir el cine. Miriam tenía dos hermanos. Uno era Raoul y la otra Mireya. Pero eso era otra historia, la de sus hermanos era una historia complicada.
-Bueno..., ¿y ahora qué?- preguntó, dando el último trago a su copa.
-He pensado que podíamos ir al cine, no sé-.
-¿A ver qué?, ¿Barbie?- se burló ella. -Además, llevamos todo el día juntas, me he cansado de ti- dijo, mucho más sería.
Violeta se ofendió un poco. No sabía si Miriam estaba de coña o lo decía de verdad.
-Había pensado en que se podía venir Ana- dejó caer la granadina.
-¿Ahora metes a Ana en nuestros planes?- quiso saber, observando con curiosidad su copa.
-Es tu novia- murmuró Violeta.
Miriam asintió y el rostro se le volvió a iluminar.
-Mmm- susurró.
-Dios, estás encoñadísima-. Violeta no pudo evitar reírse al ver la cara de su amiga, que estaba visiblemente sonrojada.
-Violeta...- intentó decir.
-¡No, no me digas nada!, seguro que solo es un lío. Tía, un lío de 5 putos años ehhh, yo también quiero- se quejó de nuevo.
Pero Miriam no se inmutó. Al contrario, se quedó sentada, borrando su sonrisa de su cara.
Fue cuando Violeta se dio cuenta de que la había cagado.
-Joder, ¿lo habéis dejado?- preguntó alarmada.
-¿Qué?, ¡no!, es solo que hace unos días nos peleamos y..., bueno no hemos vuelto a vernos, ni a hablar.
-Miriam...- murmuró, sentándose al lado de ella, y besándole la frente. -¿Por qué no me lo has dicho?, Dios, soy malísima amiga, perdóname de verdad-.
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VIOLENNA
RomanceVioleta es una joven granadina que se prepara para el casting de OT 2023, y espera ser seleccionada para ir a la academia y cumplir su sueño, triunfar en el programa e iniciar una carrera internacional y de éxito. Mientras Denna, es otra joven grana...