Antes De Ti

45

Era de noche y era hora de enfrentar a mamá. No tengo idea de cómo hablarle después de todo lo que Eddy dijo. Es complicado.

Mamá preparaba la cena y me sonreía. Yo sonreía devuelta y desviaba la mirada. ¿Cómo le preguntas a tu madre si su esposo la engaña?

-¿Cómo te fue hoy, cariño? -Pregunto sonriendo.

Asentí.-Bien.

-Donny es un gran chico, ¿no? -Levantó una ceja.

No quería hablar de Donny ahora mismo. -Supongo. -Me limité a responder.

-¿Sabes algo? Tu padre solía verme de esa manera.

-Hablando de eso, ¿Cómo han mantenido su relación por tanto tiempo?

Mamá dejó lo que estaba haciendo y suspiró. -No fue fácil. Fue algo complicado.

-¿Complicado?

-Sí, el amor no dura por siempre.

¿Qué significa eso? Esta no era mamá. Ella siempre hablaba del amor verdadero. El amor a primera vista. El amor infinito. ¿Quién es ella ahora?

-¿No? -Pregunto con un tono molesto.

-Mira,no digo que el amor no exista, existe pero es más que simple amor. Es respeto,honestidad, libertad y comunicación. No todos tienen eso.

-¡Ustedes lo tienen! -Acuse rápidamente.

Negó.-No, Diana. Es diferente.

Tengo miedo. Mi vida ha sido un libro con muchos espacios en blanco pero mi familia siempre ha estado ahí conmigo. Si no los tengo a ellos, ¿a quién tendré?

-No, no lo es. ¡Tú quieres que sea así!

- ¿De qué hablas?

- ¡Dime que está pasando! -Estaba furiosa. Eddy tenía razón. Algo no está bien. Tengo que saberlo-. ¡Dime!

-¿Diana?

-No,estoy cansada de esto.

-Cariño,¿de qué hablas?

Quiero.Romper. Algo.

Esto no es justo para nadie. Si algo anda mal en esta familia merezco saberlo. Soy parte de todo esto.

-¡Hablo acerca de ustedes dos manteniendo secretos!

El rostro de mamá se endureció. Se miraba furiosa, nerviosa y al mismo tiempo triste. Muy triste. Me odio a mí misma por hacerle todo esto pero es necesario.La verdad puede ser dolorosa pero es necesaria.

-¿Qué sabes?

Dios mío. Es verdad.

-¿Papá te está engañando? ¿Nos vamos a mudar?

Los hombros de ella se relajaron. Una muy débil sonrisa se dibujó en su rostro.

-Nocariño, no es nada de eso.

-¿Qué es?

No respondió. Tomó un vaso de agua y se acercó a mí. Colocó su mano sobre mi mejilla y sus ojos se llenaron de lágrimas. Su tacto era inseguro.

-Mira,esto no es nada de eso. Es algo que pasa pero no te preocupes, todo está bien y pido que confíes en mí, ¿Puedes? -No dejó que le respondiera-. Eres tan linda.

Alejé mi rostro de su mano. -Siempre dices eso.

-Es verdad, eres muy linda.

Dejé soltar un suspiro. -Tú eres linda. Eres rubia y delgada. Eres hermosa.

Sonrió.-Gracias, querida.

El silencio inundó la habitación. No dejaba de ver como las temblorosas manos de mamá se deslizaban por todos los instrumentos de la cocina. Realmente era hermosa. Ahora es más delgada. Sonreí ante el hecho que esa mujer llena de alegría es mi madre.

-¿Mamá? -Llamé su atención.

-¿Si?

Me acerqué a ella y la abracé. Algo me empujó como nunca ha decirle algo que es usual pero esta vez se sentía necesario. Como si no hubiera mucho tiempo.

-Te quiero mucho.