Antes De Ti

47

Es viernes. Exactamente en dos semanas mis hermanos vendrán de nuevo. Estoy en el baño de chicas arreglando mi cabello cuando Melinda entra.

—Hola Diane.

Me encogí de hombros. — ¿Qué tal?

Me sonrió. Pude ver en su rostro algo no estaba bien.

— ¿Sabes que me dijo Rilley?

—No.

—Donny y tú están juntos. ¿Eso no es incesto?

Levanté una ceja. —Pensé que habías olvidado eso. No somos familia.

—Lo sé, pero no entiendo.

— ¿Entender el que?

Se acercó y acomodó su escote. —Don y tú juntos.

— ¿Te gusta? —Pregunté.

Negó moviendo un dedo. —No, ya no. Hay un chico aún más lindo que él.

—Bien por ti.

Me alejé del espejo y retrocedí unos cuantos pasos pero Melinda abrió su boca de nuevo.

Dijo: —No es para siempre.

—Melinda, no entiendo nada.

Rizó su cabello con la mano mientras ponía los ojos en blanco. —Su estúpida relación. ¿No te das cuenta, Diana?

— ¿Crees que quiero escuchar esto?

—Deberías. Conozco a Donny mucho antes que tú. Él es muy lindo y toda la escuela por algún motivo, lo quieren. Mira, tú no eres bonita. Eres regular. No usas maquillaje, ¡No eres delgada! Tus ojos son lo único casi lindo de ti.

No podía hablar. Quería llorar. Quería golpearla.

—Eres tan torpe. Si, están juntos pero eso no significa nada. Rilley y yo estuvimos juntos hace un par de años y luego nos dimos cuenta que éramos mejores amigos, no pareja. Eso pasa con ustedes, lo confunden todo. Te lo digo porque en algún momento de mi vida me agradaste pero Diane, esto no es tan lindo como tú crees. Tú eres una idiota al creer en este estúpido cuento de hadas. Eres la maldita cenicienta pobre. No la linda, con el vestido y las zapatillas. Eres fea, ¿entiendes? Nunca serás como yo. Nunca serás lo suficientemente buena para alguien, mucho menos para Donny.

Hice el mayor esfuerzo de mi vida y le sonreí. Luego me volteo y le doy la espalda ignorándola. Cierro los ojos con fuerza y salgo.

He sido tan tonta. Tiene razón. No soy nada comparada con el resto del mundo. Han sido solo falsas esperanzas.

Me siento tan pequeña. En cualquier momento alguien me aplastará. Esperen, ¡Ya lo hicieron!

El resto del día fue silencioso y doloroso. No hablaba mucho con nadie, ni con Matt. Todo es gris. Me dolía besar a Donny sabiendo todo lo que dijo Melinda. No merece estar con alguien mediocre como yo. Tal vez estamos destinados a ser solamente amigos.

Después de la escuela me encerré en mi habitación y respiraba lentamente. Tiene razón. Eso es lo que más duele.

Nunca me he considerado la persona más horrible del mundo pero reconozco que no soy bonita o al menos así me siento. Mi estómago no es plano completamente. Mis piernas parecen regordetas. Nunca encajaré en unos jeans talla cero. Me siento gorda. Soy gorda aunque casi todos digan que no. Y no hablo de mi peso, es como si todo el mundo fuera mejor que yo. Suena mal pero es cierto, he visto chicas con algo más de peso que yo que se miran fabulosas, no las juzgo, odio juzgar pero ¿Por qué no puedo ser como el resto del mundo? Todo esto me lastima constantemente y suelo ignorarlo. ¿Qué puedo hacer?

Y no soy especial. No tengo ningún talento. Todas esas personas maravillosas con el don del arte, la música, la poesía y luego estoy aquí. Este punto en la humanidad sin objetivo. Odio la persona en el espejo. Soy solamente un conjunto de heridas y cicatrices. De un pasado lleno de dolor y una infinidad de lágrimas silenciosas.

Hay noches y algunos días donde la oscuridad es mi única amiga.

El odio a sí mismo es más peligroso que caer dentro de un volcán.

No soy especial. No soy única y mucho menos soy una en un millón. Soy simplemente yo. Y odio eso.

He cerrado los ojos y deseado que esta vida fuera solo una pesadilla. ¿Por qué estoy aquí? Algunos días pienso que la vida es maravillosa pero después recuerdo que solo estoy disfrazando la realidad. Estoy mintiéndome.

Estoy sola.