Capítulo 18.

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Otro día más, Luke me despertó a su especial manera.

Y cuando digo especial, me refiero a cosquillas y besos. Y que conste, no me quejo.

-Luke, quiero dormir- dije ahogando mi cabeza en la almohada intentando ignorar su boca en mi cuello poniéndome los pelos de punta.

-Vamos- me rogó una vez más -Que ya he hecho el desayuno- y en ese momento sentí algo húmedo.

Me había chupado el cuello.

-¿Me acabas de chupar?- pregunté con los ojos por fin abiertos y él rió con esa típica risa a lo Luke Hemmings que te hace sonreír inconscientemente sólo por el sonido de su voz.

Sí, seguro que sabéis a lo que me refiero.

-Despierta- dijo alargando la "a".

-No- contesté haciéndome la dormida de nuevo.

-Si ya estás despierta, sólo tienes que levantarte.

-Estoy dormida, ¿es que no lo ves, idiota?- contesté bromeando intentando esconder la sonrisa que se expandía por mi cara.

-Si no te levantas tú, lo haré yo, y sabes que lo haré- me amenazó Luke.

-De acuerdo, de acuerdo- dije poniendo mis manos en alto y levantándome.

Fui a la cocina, seguida de Luke, donde el desayuno ya estaba servido.

-Eres como la mujer de la casa- le dije sentándome y comenzando a comer.

-¿Qué?- contestó Luke confundido.

-Sí, haces el desayuno, me levantas, eres la mujer de la casa.

-Vale, quizás haga el desayuno pero no soy la mujer de la casa.

-Sí lo eres, tengo que empezar a serlo yo, últimamente estás muy afeminado.

-Perdona pero no sé a que te refieres, yo soy muy varonil y macho y fuerte y...no soy la mujer de la casa- dijo a la defensiva aunque evitando reírse y yo negué con la cabeza divertida para terminar de desayunar.

Después de eso, me duché, me vestí y me preparé para ir a casa de Liz junto con Luke.

No iba a mentir diciendo que no estaba nerviosa, porque lo estaba.

Y no era por el hecho de estar con sus padres y sus hermanos ya que ya les conocía, pero la idea de ser presentada ante sus abuelos, tíos y primos me tenía ligeramente... alterada.

¿A quién no le pondría nervioso el conocer la familia al completo de tu novio?

Además, algo me decía que la intención de Liz al organizar una comida familiar así no era el simple hecho de reunirse, si no de que todos ellos me vieran y conozcan como la novia formal de su hijo pequeño.

Quizás Liz no sea mi madre, pero la conozco tanto como si lo fuera.

Estaba tan sumida en mis pensamientos que cuando me quise dar cuenta, Luke ya estaba tocando el timbre de la casa de su madre y Liz abrazándome.

-Sois los últimos, ya están todos aquí- dijo Liz después de saludarnos.

Genial, encima llegamos tarde, no podíamos llegar a la hora y pasar desapercibidos, no, los últimos.

Vale, quizás estaba más que sólo un poco nerviosa.

Entramos y poco a poco todos sus abuelos, tíos, primos y demás familiares se acercaron a saludar.

Pensé que me mirarían analizándome como dudando en darme su aprobación o no; pero en vez de eso todos me sonreían, hacían algún comentario agradable y después de tener una pequeña pero interesante conversación sobre algún tema no tabú, se iban con una sonrisa y algún que otro cumplido a los que, por cierto, descubrí que no estaba acostumbrada.

The Neighbour // l.h #Wattys2015Donde viven las historias. Descúbrelo ahora