—Literalmente estabas de la mano con Lynn, la chica que supuestamente dices odiar.—dijó su amiga incrédula.—¿De que me perdí?
—De nada, Emms, lo juro.—desde la mañana sus amigos solo hablaban de aquello que había pasado en la clase anterior.—Solo tomé su mano para arrastrarla antes de que dijera una estupidez y termine castigada.
—¿Y desde cuándo a ti te importa si la castigan?—se burló Jace siguiendo la corriente a la rubia.—Antes empujabas a que fuera castigada.
—Además pensé que preferías cortarte la mano antes que tomar la de Lynn.—continuó la rubia.
Kat tomo aire profundamente intentando no molestarse aún más, haberle tomado la mano de Lynn por un mini segundo había sido un error, prefería mil veces que sus amigos le estuvieran regañando por pelear con ella, a que se estuvieran burlando por haber tomado su mano.
—Solo actúe rápido, no significa nada.—dijo irritada.—La sigo odiando tanto como el primer día que la vi.
Sus amigos se miraron entre si con una sonrisa burlona, tenían la intención de seguir burlándose pero al ver la mirada que les dio su amiga se dieron cuenta de que era mejor callar.
Siguieron su recorrido hasta la cafetería en silencio, se sentaron en la misma mesa de siempre, Kat ignoro mirar hacia la mesa donde Lynn estaba con su equipo de deportistas. Sintió la pesada mirada de la deportista sobre ella, Kat estaba segura de que en cualquier momento soltaría algún comentario burlesco contra ella.Se sentó junto a sus amigos comenzando a comer y charlar sobre las odiosas tareas que dejaban los profesores cada fin de semana. Su mirada un tanto pérdida se cruzó con su amigo Sam, le sonrió y le indico que se sentará con ellos, él un poco nervioso al ver a Jace se negó pero la mirada de la pelirroja le obligaba un poco a ir.
—Hola.—saludó el chico sonriendo tímido.
—Hola Sam, siéntate, siéntate.—le dijo Jace amigable, cómo de costumbre.
—¿Y que tal?¿Cómo te han tratado las clases?—preguntó la rubia.
—Se podría decir que bien, muero porque llegue el fin de semana.—contestó el chico con aire desanimado.—Tengo miles de trabajos.
—Estamos todos iguales.—informaron los tres menores igual de desanimados.
Los cuatro comenzaron a hablar, aunque en un principio a Sam le costó participar en la charla finalmente hablaba con tranquilidad, intentando ocultar los nervios que sentía cuando su mirada se encontraba con la de Jace, algo que para la pelirroja no pasaba por alto y sonreía enternecida por dicho acto.
Mientras veía a sus amigos hablar su mirada paso por un pequeño lapso de tiempo sobre la mesa de las deportistas, observo a Lynn reír con las demás, rápidamente volvió a enfocarse en sus amigos sin darle importancia a la chica y a su escandalosa risa, tuvo que ignorar la sensación de la mirada de Lynn sobre ella.La pelirroja caminaba en dirección al baño con prisa, su próxima clase comenzaría en un rato y no podía llegar tarde, agregando que quizás la profesora podría darles más minutos de castigo.
Al entrar el baño, ella apuro a hacer sus necesidades y luego lavar sus manos dándole unos retoques a su cabello corto. Su mirada subió al espejo para observar su aspecto encontrándose a Lynn a un lado.—¡Carajo Loud!—exclamó dando un pequeño salto.—No hagas eso.
Lynn solo río ante la reacción de ella y entro al baño para salir minutos después copiando la acción de la pelirroja.
—Bien zanahoria, muévete o llegaremos tarde y nos castigarán por tu culpa.
La pelirroja abrió su boca ofendida comenzando a caminar hacia la puerta con la castaña.
—¿Mi culpa?—replicó.—Mejor cállate de una vez.
—Tu no me callas.—le dijo igual de ofendida.
Kat la miro enojada y mordió su lengua sin seguirle el juego, no se arriesgaría a una semana más de castigo por dejarse llevar y pelear nuevamente con Lynn.
La chica a su lado sonrió, por primera vez "ganaba" en una discusión y tenía la última palabra.Entraron al aula sin decir nada, agradeciendo que su profesora aún no llegaba. Kat miro con enojo a Lynn y fue hacia su asiento al lado de Emma.
—La odio, la odio.—suspiró la pelirroja, odiaba no tener la última palabra contra la otra chica.
—Joder, íbamos tan bien.—dijo Jace cansado.—¿Que paso ahora?
—Ella pasa, siempre anda ahí jodiendo a todos, dijo que nos castigarán por mí culpa.—le respondió apartando su mirada de la castaña, quien reía con su amiga, Emily.—Esta es la última semana de castigo, debo aguantarme mis ganas de golpearle en el rostro.
Emma y Jace se miraron, sin entender como es que su amiga podía tenerle tanto odio a Lynn por estupideces o cosas cotidianas, Kat siempre buscaba una excusa para poder ir contra ella, por ejemplo está.
La profesora entro al aula comenzando a hablar sobre problemas ambientales, la clase se había sumido en silencio prestando atención a lo que decía la profesora. Kat miraba al frente escuchando a la mujer hablar sin darse cuenta de algunas miradas provenientes de la deportista, claro, miradas que no significaban nada, el único en darse cuenta de ello fue Jace, quien no lo paso por alto, si no supiera que se odiaban mutuamente podría pensar otra cosa.
La campana sonó, Emma y Jace guardaron sus cosas y se despidieron de su amiga deseándole suerte, recordándole tener paciencia a menos que quisiera pasar mucho más tiempo con Lynn. La deportista se despidió de su amiga y la profesora les entrego una escoba y un tacho con agua con un pañuelo para las ventanas, luego se retiró.
Lynn comenzó a barrer por cada rincón, Kat tomo una liga y ato su cabello para comenzar a limpiar las ventanas, que para su suerte no eran tantas.
—¿Te molesta si pongo música? Es que me aburre el silencio.—le pidió la pelirroja.
—Esta bien, no me molesta.—respondió sin mirarla, Kat no le dio importancia.
Tomo su celular colocándolo en el escritorio e iniciando su playlist.
Can't Take My Eyes off You empezó a sonar, Kat ahora sonreía a medida que limpiaba los vidrio, amaba esa canción.
Lynn odiaba esa canción, sus hermanas la habían traumada con Patrick Verona y aquella canción, iba a quejarse y pedirle que sacará esa canción espantosa pero cuando vio a Kat sonriendo mientras movía la cabeza de un lado a otro decidió mantenerse callada, prefería el ambiente tranquilo que compartían en ese momento a pelear con ella por una canción.
Solo era una canción y debía soportarla hasta que terminara, el buen humor de Kat al oírla no le importaba, claro.Al terminar de limpiar ninguna dijo nada, aquel día solo se habían dedicado miradas sin significado algunos, solo eran miradas.
—Adiós.—se despidieron ambas yendo por caminos opuestos.
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𝐌𝐘 𝐄𝐍𝐄𝐌𝐘, lynn loud jr
FanfictionKat y Lynn nunca se han llevado bien, eso jamás ha secreto para nadie. Desde el primer momento en el que se vieron decidieron odiarse solo por juzgarse antes de tiempo, quizás todo ese odio que sentían ambas poco a poco podría convertirse en cariño...