La pelirroja soltó un suspiro mientras metía su pijama en su bolso, en el momento acepto gustosa de asistir a la pijamada con Emma y Emily, pero ahora sabiendo que Lynn Loud también estaría cambiaba las cosas, ¿y si Lynn intentaba ahogarla mientras dormía? Bueno, si no lo intentaba ella primero.
—Oye, cualquier cosa no dudes en llamar, iré a buscarte si no te sientes cómoda.—le dijo Mattheo mientras la miraba desde la puerta.
Ella le regaló una sonrisa y asintió. Su celular sonó, miro la pantalla y encontró un mensaje de...Lynn.
Lynn
Estoy en tu puerta
Tú
¿Que?
Es broma, cierto?Lynn
No.
—¡Kat!—llamo su hermano desde abajo.—¡Es Lynn Loud, viene por ti!
Okey, ¿que está pasando?
La pelirroja tomo sus cosas y bajo las escaleras, Mattheo estaba a un lado de la puerta con la misma confusión que ella.
Lynn tenía una mochila y un conjunto deportivo.—Que...agradable sorpresa.—solto Kat confundida.—Sin querer ser grosera, ¿que haces aquí?
—¿Sabes dónde queda la casa de Emily?—nego.—Yo si, la última vez que seguiste una ubicación te perdiste, así que mejor ir conmigo.
Era cierto, Lynn se había burlado toda una semana cuando intento seguir una ubicación y termino en una parte de la ciudad que jamás había conocido. Lynn solo sonrió con burla y ella soltó un suspiro, Mattheo miraba todo en silencio sin entender, ¿si no eran amigas y se llevaban mal, por qué venía por ella?
—Entonces vamos.—dijo.—Nos vemos mañana, Matt.
—Más les vale no pelear.—advirtio a ambas, ellas asintieron con una sonrisa.—Que la pasen bien.
Cerro la puerta y ambas comenzaron a caminar, Kat iba a un lado de Lynn sin decir nada.
La pelirroja estaba confundida ante el cambio de humor de la chica, esa misma mañana parecía enojada con ella y ahora venía a buscarla y se mostraba un poco más tranquila.—¿Puedo saber que ocurre?—se animó a preguntar.—¿Que tramas?
—¿Yo?—Lynn la miro confundida.
—Si, tu.
—Yo no tramo nada.—contesto ofendida.—¿Por qué piensas tan mal de mi?
Kat alzó sus cejas mientras se cruzaba de brazos mostrando obviedad ante su pregunta, ¿por qué no lo pensaría?
—Bien, ya se.—suspiro Lynn.—Pero no tramo nada, ¿acaso prefieres pelear? Porque si es así...
—No.—se apresuró a decir, o sea, solo se sentía tan extraño no pelear que no estaba acostumbrada.—Pero aún así, tendré mis ojos puestos en ti.
—Me halagas, zanahoria.—sonrió con burla ganándose un pequeño golpe.
—Sabes a que me refiero, Loud.
Los padres de Emily no estaban, la casa estaba solo habitada por las cuatro chicas, todas llevaban ya un pijama, y por primera vez Kat vio a Lynn sin estar vestida completamente de rojo y deportivo. Estaban comiendo pizza mientras miraban una película de terror, Emma estaba a un lado suyo mientras abrazaba su brazo, ya no sabían que hora era, toda la tarde estuvieron charlando y haciendo karaokes.
—Podemos ver otra cosa.—sugirió Emily al verla, todas asintieron solo para que Emma ya no tuviera miedo.—¿Una de romance?
Emma salto contenta, Kat asintió sin darle importancia, cualquier película para ella estaría bien, Lynn se mostró un poco disgustada pero termino cediendo a las miradas de ellas.
10 cosas que odio de ti, la película favorita de Kat, aunque claro, después de La masacre en Texas.
Adoraba el personaje de Kat Stratford, sobretodo amaba llamarse igual que ella. Las chicas miraban la pantalla mientras suspiraban al ver a Patrick Verona interpretado por el amado Heath Ledger. Lynn decidió por primera vez prestarle atención a la película, una sonrisa salió de sus labios al notar el parecido en la personalidad Kat y su Kat.Película patética, pensó la castaña, mentía, le había encantado, sobre todo la escena donde Kat leé su poema.
Su mirada viajo a la pelirroja cerca suyo, casi estaba dormida, sus ojos poco a poco se cerraban y Emma ya estaba completamente dormida, Emily seguía con su mirada pegada al televisor. Su atención se la llevó la molesta zanahoria, su cabello suelto y ligeramente despeinado, sus pecas se notaban ligeramente por la luz reflejada de la pantalla, sus ojos celestes medios cerrados y sus suspiros e intentos de estar despierta.
Emily sonrió al notar que la mirada de su amiga estaba pegada a la chica que supuestamente decía no soportar.
—Creo que ya es hora de dormir, mira la hora.—dijo la rubia mirando el reloj.
Casi eran las cuatro de la mañana y agradecían que no tuvieran clases. Lynn asintió, todas dormirían en sus bolsas de dormir, sin dudarlo cargo a Emma como princesa y la dejo en su lugar casi tirándola, por suerte Emma no se había despertado.
—¿Y Kat? No vas a dejarla ahí.—le reto su amiga cuando vio que no tenía intenciones de cargarla.
—No, claro que no.—mintió, obviamente planeaba dejarla ahí y que duerma toda doblada.
Suspiro ante la mirada de su amiga y se acercó a Kat cargandola como había echo con Emma, Kat se removió por el movimiento pero en unos segundos quedó completamente dormida, Lynn admiro su rostro sereno, solo cuando dormía parecía tranquila e inofensiva.
—Y no se te ocurra tirarla como saco de papas.—le advirtio Emily finalmente dándose vuelta para dormir.
Lynn bufo molesta, termino soltando con delicadeza a la pelirroja, antes de alejarse la chica se aferró a su brazo sin intención de dejarla ir, algo que no sabía Lynn, era que Kat tenía la extraña costumbre de dormir abrazada a una almohada, si no no podía dormir tranquila.
—Ya, sueltame.—se quejo Lynn pero el agarre de la pelirroja no se aflojó, más bien se aferró con más fuerza.
Lynn soltó un quejido, miro a la pelirroja dormida, termino por acercar más su bolsa de dormir a la de Kat y acostarse en ella sin mover su brazo, espero paciente unos minutos, en algún momento tendría que soltarla, ¿no?
Cuando los primeros rayos se hicieron presentes, la primera en despertar fue Kat, abrió sus ojos con pesar, lo primero que vio Kat fue a Lynn durmiendo a su lado.
¿Que fue lo que pasó?
Luego noto que ella tenía el brazo de Lynn agarrado, hizo una mueca recordando su costumbre de aferrarse a cualquier cosa dormida, le asombra que Lynn no le intentará cortar su mano para poder recuperar su brazo.
La castaña tenía el pelo suelto y entre su cara, parecía completamente tranquila, seguramente cuando dormía era su único momento donde estaba serena.Termino soltando el brazo de ella, sintiéndose un poco avergonzada. Volteo a un lado y se encontró a Emma, con el rostro pintado...luego miro a Emily que tenía un bigote pintado, miro a Lynn que era la única intacta, soltó un quejido levantándose para ir al baño a verse en un espejo.
—Mierda...—Kat tenía escrito Weasley en la frente, en sus mejillas unos corazones y en su barbilla una barba falsa.—Ya va a ver esta maldita.
Bajo de las escaleras con sigilo, recordó que Emma llevaba su maquillaje a todos lados, agarró su bolso y busco entre el cualquier cosa que sirviera.
Agarró el labial de la chica y comenzó a pintar sobre la cara de Lynn, le sorprendía que no se despertará pero fue mejor para ella, después tomo el delineador de la chica y comenzó a dibujar un bigote. Sonrió al ver su rostro igual de pintado, ahora le veía el lado positivo a la pijamada.Cuando terminó decidió volver a dormir un rato, está vez se aseguró de tomar una almohada para abrazar y no tener que volver a tocar a Lynn Loud.
—¡Zanahoria!
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𝐌𝐘 𝐄𝐍𝐄𝐌𝐘, lynn loud jr
Hayran KurguKat y Lynn nunca se han llevado bien, eso jamás ha secreto para nadie. Desde el primer momento en el que se vieron decidieron odiarse solo por juzgarse antes de tiempo, quizás todo ese odio que sentían ambas poco a poco podría convertirse en cariño...