🛍𝒄𝒉𝒂𝒑𝒕𝒆𝒓 𝒕𝒘𝒆𝒏𝒕𝒚 𝒐𝒏𝒆🛍

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— ¿Estás bien?

YajaTzael volteó a ver a JiMmy y con los ojos cristalizados junto con un nudo en la garganta, asintió con una sonrisa.

— Solo estaba pensando en tu hermano — Murmuró — En tu tío... en mi gatito.

JiMmy le sonrió, pero en comparación a él, sí llegó a romperse hasta llorar por echar tanto de menos a su familia.

— Supongo que con el tiempo te acostumbras — Comentó — Llegará un momento en el que el recuerdo es lo único que tendrás.

— JiMmy, yo lo lamento...

— No, papá — Negó — Esto no es tu culpa.

— Tal vez si te hubiera cuidado más, no estuvieras aquí — YajaTzael susurró — Siempre fuiste mi chiquito rebelde y no sabes cuánto te amo.

— Yo también te amo mucho — Sonrió — Discúlpame si alguna vez no lo demostré.

— Siempre lo hacías, a tu manera.

Entre lágrimas, él asintió un par de veces y deseó con todo su corazón poder acercarse a YajaTzael y abrazarlo como tanto había querido, pero sabía que las cadenas no lo dejarían.

— Lo único que me consuela es tenerte aquí — Sinceró — Pero preferiría que no estuvieras aquí, así no tendrías que ser abusado por JimSi.

YajaTzael hizo una mueca y con las mejillas rojas se limpió las lágrimas rápidamente para que él no las viera.

— Ya te dije que solo lo dice para molestarte, no caigas en su hijo, bebé — Murmuró — No ha pasado entre...

— ¿Por qué tienes que mentir? ¿Por qué tienes que acceder? — JiMmy cuestionó — ¿Por qué siempre tienes que dar tu vida por nosotros sin importar si te rompes en el proceso?

Sin saber exactamente qué responder, YajaTzael se encogió de hombros y cerró los ojos mientras se apoyaba en la pared.

— Porque los amo — Susurró — Porque tú y JiMin son mi vida.

— Pero te estás lastimando...

— JiMmy, algún día llegarás a entender de que algunos padres se rompen para darle esas piezas a sus hijos — Explicó — Y mientras ellos estén reparados, no importa si nosotros quedamos rotos.

JiMmy asintió con la cabeza, su mentón tembló y su pecho dolió a más no poder, pero ese dolor no llegaba a compararse con lo que él sentía por ver a uno de sus hijos así de destruido.

— " Mi propuesta sigue en pie... Haz lo que yo quiero y suelto a JiMmy "

— Papá...

Aún sabiendo que las cadenas no lo dejaban, JiMmy gateó hasta donde más pudo y con una sonrisa lo llamó para que se acercara.

— ¿JiMin sí creció mucho?

Cuando ambos llegaron a tomarse de las manos a pesar de que las cadenas lastimaran sus tobillos, JiMmy le sonrió tan roto y tan mal que él solo deseó reparar esa sonrisa.

Como había dicho, los padres se rompían para darle sus piezas a sus hijos y así repararlos incluso si ellos quedaban rotos de por vida.

— Tú lo verás con tus propios ojos — Aseguró — JiMmy, yo te juro por ti y por tu hermano, que yo te sacaré de aquí.

— ¿Y a qué precio?

No había precio si sus hijos estaban bien.

































🛍 ¸¸.•*¨*• 𝐾𝑖𝑡𝑡𝑦 𝑖𝑠 𝐹𝑎𝑛𝑐𝑦 •*¨*•.¸¸ 🛍 (𝐿𝑖𝑏𝑟𝑜 𝑡𝑟𝑒𝑠)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora