Kevin
La luz que provenía de una pequeña ranura en la pared me dio directamente en el rostro, haciendo que me despertara.
Me dolía mucho la cabeza, había recibido más golpes de los que me esperaba. Abrí lentamente los ojos, el olor a humedad y a metal cubría todo el lugar.
Traté de mover una de mis manos hacia mi cabeza y me percaté de que estaban atadas a una especie de columna. Tiré de ellas y otro dolor punzante me azotó de repente.
—¡Mierda! —exclamé agitado. Estaba seguro de que me había roto la muñeca o tenía un esguince porque el dolor fue insoportable —. Esto no puede estar pasando —tiré mi cabeza hacia atrás y lancé un suspiro prolongado.
—Es bastante real, así que despierta ya—una voz que me resultaba familiar sonó a mi espalda.
Me moví un poco para ver mejor y Norman estaba atado de espaldas a mí al otro lado de la columna.
—¿Estás bien? —le pregunté.
Sabía que después de las terribles noticias que habíamos recibido y el hecho de que nuestra vida estaba en peligro en manos de unos criminales, no lo estaría. Pero necesitaba comprobar que por lo menos no estuviese herido.
Hubo un silencio fúnebre por unos segundos.
—No puedo creer que esto esté sucediendo.
—Lo sé, lo siento… Supongo que no podemos huir de nuestro pasado.
—¿Estás admitiendo que sí lo hiciste sin protección con otros antes?
—No, estoy reconociendo que por más que he cambiado, para ti siempre voy a ser el Kevin que conociste siendo un desastre. No hay nada que pueda hacer.
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We Found Our Destiny
Roman d'amour"No creo en el cliché de que un matrimonio arreglado se convierta en uno real alguna vez". Había dicho Norman cuando definió los puntos de su relación con Kevin, su esposo por contrato. Seguro de sus palabras, pero el destino a veces tiene otros pl...
