En un reencuentro teñido de nostalgia, dos almas se entrelazan una vez más después de una larga separación. Los recuerdos resurgen vívidamente, pero para Hana, este retorno aviva un amor no correspondido. En este nuevo capítulo, el anhelo se entrela...
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El nuevo año escolar comenzó con un aire de expectación y cambio. Hye Min, Hana, Joo Kyung y Soo Ah se encontraban entre los estudiantes que compartían el mismo salón de clases.
Cuando Hana entró en el aula, una chispa de emoción iluminó el rostro de Tae Hoon al verla. Con un gesto de choque, expresó su alegría al descubrir que también había sido asignada a la misma clase.
Sin embargo, justo cuando estaban a punto de chocar las manos en señal de saludo, Tae Hoon retiró la suya bruscamente. Hana, con una mirada decidida, le aseguró que nunca más caería en esa trampa.
Mientras tanto, Soo Ah interrumpió el momento compartiendo una noticia sorprendente con Joo Kyung y Hana.
Informó que Soojin, durante las vacaciones de invierno, había decidido abandonar la escuela. Rumores vagos sugerían que se había marchado al extranjero.
La peor noticia llegó para Joo Kyung cuando Suho decidió romper con ella, sumiéndola en una profunda tristeza.
A pesar de este golpe emocional, continuaron con sus vidas y finalmente se graduaron.
Aprovecharon el momento para tomarse fotos, celebrando el fin de una etapa y el comienzo de otra.
Entre risas y recuerdos, cada uno posó para una foto grupal, capturando la conexión que habían compartido a lo largo de los años.
A pesar de la desilusión amorosa, Joo Kyung se enfocó en su carrera de maquillaje, que cada vez cobraba más importancia en su vida.
Por otro lado, Seojun retomó la idea de convertirse en aprendiz gracias a Hee Kyung, la hermana de Joo Kyung.
Con su convicción, persuadió a Hana para que se uniera a él en esta nueva aventura, aunque pronto descubrió que quizás no era lo que realmente le apasionaba.
Mientras tanto, Suho continuaba manteniendo contacto con Hana, preocupado por el bienestar de Joo Kyung.
Hana siempre le informaba sobre la situación de su amiga.
En los días recientes, Hana experimentaba una profunda incomodidad, una sensación inquietante que la llevaba a pasar largas horas en la cama.
Se sentía atrapada en un estado de letargo, incapaz de encontrar motivación para levantarse o hacer algo productivo.
El aburrimiento se convertía en su compañero constante, envolviéndola en una neblina de desinterés y desesperanza.
Ansiaba la soledad, anhelaba la tranquilidad de un espacio donde pudiera enfrentarse a sus propios pensamientos sin distracciones.
