En un reencuentro teñido de nostalgia, dos almas se entrelazan una vez más después de una larga separación. Los recuerdos resurgen vívidamente, pero para Hana, este retorno aviva un amor no correspondido. En este nuevo capítulo, el anhelo se entrela...
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Los días pasaban velozmente para Hana, quien se mantenía al tanto del debut de Seojun. Mientras tanto, ella reconsideraba retomar su carrera como aprendiz, impulsada por Hee Kyung, quien a pesar de todo insistía en que debía volver a intentarlo. Con su apoyo y aliento, Hana finalmente se armó de valentía y decidió volver a intentarlo.
Durante ese tiempo, Hana también se encontró con Joo Kyung y Soo Ah, con quienes pasó horas hablando y paseando por las calles.
Aunque el debut oficial de Hana aún no había sido anunciado, salió de la empresa con una velocidad inusual, llevando papeles en sus manos.
De repente, chocó con alguien, y al levantar la mirada, se sorprendió al ver a Soojin frente a ella.
—Hana—, soltó Soojin casi en un susurro, mirándola con una sonrisa mientras Hana parpadeaba fijamente al verla frente a ella.
En un abrir y cerrar de ojos, las dos chicas se encontraban en una pastelería. Tenían demasiadas cosas que contarse, y no querían perder la oportunidad. Las dificultades del pasado quedaban atrás y ahora estaban completamente inmersas en el presente.
—¿Cómo has estado? Oí que tuviste un accidente y que perdiste algo de tu memoria, pero que la estás recuperando. Bueno, ya la recuperaste. Realmente, en ese momento quería preguntar sobre ti, llamarte, pero tenía miedo de que no me reconocieras. Estaba segura de que yo sería una de las primeras personas a las que no ibas a reconocer—, soltó Soojin con una media sonrisa, mientras Hana la escuchaba atentamente.
—Estoy mejor—, respondió Hana con una sonrisa, su mirada transmitiendo una mezcla de alivio y gratitud. —Y tú, ¿cómo has estado?
—Me fui al extranjero a casa de mi tía con mi madre cuando me retiré. Mis padres se divorciaron—, comenzó Soojin, su voz resonando con una pizca de nostalgia mientras compartía un fragmento de su vida con Hana. —Además, estuve haciendo trabajo voluntario en el extranjero. Acabo de regresar de Haití—, explicó con calma, mientras Hana asentía en comprensión al escucharla.
Pocos minutos después, Soojin continuó su relato, explicando que también se había encontrado con Joo Kyung y que había aprovechado la oportunidad para disculparse con ella.
En ese momento, Soojin se volvió hacia Hana y, con una expresión sincera, también se disculpó con ella.
Reconoció que tal vez en algún momento había soltado palabras hirientes, y Hana, con gentileza, respondió diciendo que lo olvidara, que el pasado ya había quedado atrás.
Después de ese emotivo momento de disculpas y perdón, las dos chicas se despidieron con una sonrisa en los labios, prometiéndose encontrarse de nuevo.
