La sala era muy grande, un circulo de piedra rodeado de velas era lo que ilumino su pequeña figura.
Vestida con rojas negras similares a las de un ranger, la túnica y su rostro hacian juego.
El aroma a sangre estaba presente en todo el lugar, habian 5 hombres en la recamara llamada El Purgatorio.
Era donde los iniciados debian supersr las pruebas iniciales de la orden, el anciano sentado en el trono de piedra la veia.
Cubierto de pies a cabeza por una tunica blanca llena de símbolos santos y pareciendo ser un mensajero de los dioses.
El hombre de edad avanzada pregunto con sus dedos entrelazados y viendo a la niña con la cabeza baja.
- ¿Que eres?
Ella no alzo la cabeza y miro la daga en su mano, la sangre mancho sus manos mientras toco la hoja que dio muerte a los 5 niños detras de si.
- Un arma.
Respondio sin sentimientos en su vos.
- ¿Que hacen las armas?
Pregunto el a la ves que las puertas fuera de la sala se abrieron.
- Matar.
Declaro sin mas.
- ¿Cual es tu razon de ser?
Limpio la daga con un pañuelo negro y gusrdo este mientras que la daga se mantuvo en su mano derecha.
- Matar.
El se puso de pie y coloco sus brazos detras de si antes de caminar fuera del circulo de cera roja por las velas.
- ¿Quien es tu dueño?
Pregunto y ella respondió sin un segundo de duda.
- El imperio.
El dio la orden y los maestros jovenes obedecieron, trajendo la proxima prueba.
- ¿Por quien matas?
Ella se giro y miro las puertas que se abrieron.
- Por el imperio.
Los hombres de tunicas negras arrojaron al circulo a un joven de unos 10 años, era mas fuerte que ella y parecia asustado.
Este miro en silencio a la niña mas joven que el, esta con sus rojos iris.
Dicto el destino del pobre ladron, al final los inquisidores retiraron el cadaver en silencio.
El sonido del cuerpo raspando la piedra era relajante, la niña limpio su rostro.
Tenia magulladuras, moretones y incluso una mordida en su antebrazo.
Estaba muy lastimada, no obstante no se quejo o dijo algo. Solo regreso a su posición de espera mientras su abuelo hablo y le ofrecio un pañuelo.
- El dolor es parte del mundo que te vio nacer, debes dominarlo para ser parte de este. Una ves sometes el cuerpo con la mente, nada podra doblegar tu voluntad.
La lección fue recibida y ella asintió, tomo el pañuelo y tras limpiar la sangre de su rostro.
La niña escucho gritos desde la entrada a esta ala del inquisitorum.
- Podrias haberlo hecho mas rapido, no obstante lo hiciste.
Dijo el anciano que se sento en su trono nuevamente, tras dar la orden a uno de los maestros.
Este asintió y la trajeron.
- Probaremos algo mas dificil...
Dijo el y las puertas se abrieron nuevamente.
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Overlord: El Rey De Los Brujos
FanficEl ser supremo no estaba en Nazarick, no estaba con sus NPC, no estuvo en su gremio y sobre todo. Estaba solo, en el cielo viendo el contador acercarse al 0 final que daría fin a una etapa de su vida, pero algo cambio. Llegando no 600 años después d...