Capitulo 44

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                      Narra Isabella

Han pasado aproximadamente 30 minutos desde que Harry se fue y me dijo que volvería, ahora mismo estoy en una silla sentada observando como todos bailan con mi inseparable amiga a mi lado.

– Potter es un imbécil, aunque creo que eso ya lo sabíamos–

– Tranquila Pans lo entiendo, son sus amigos yo también dejaría a mi pareja de baile si tú me necesitarás y no lo dudaría–

– Si pero, mírate ¡Por Merlin! Estás hecha una diosa y el solo se va en vez de aprovechar la única oportunidad de su vida, creo que sus estúpidas gafas necesitan más aumento–

– Que cosas dices – me reí.

– La única verdad amiga, de verdad ese vestido te queda perfectamente en tu hermoso y sensual cuerpo y el en vez de aprovechar y declararte su amor, baile un solo estúpido vals y se va–

– Pans cálmate estoy bien, además deja de decir tonterías Harry no me va a declarar su amor–

– Bueno pero si ese día llega, te voy a decir te lo dije y...rechazalo amiga se lo merece por imbécil–

Reí ante las ocurrencias de mi amiga, siempre me hace sentir bien como la quiero.

– Señorita Parkinson ahora sí me va a permitir bailar con usted– se acercó Blaise.

– Si llévatela por favor, no me lo tomes a mal Pansy te amo pero llévatela antes de que comience a inventar insultos nuevos– le dije a Blaise, ella me vio con cara de indignación, iba a hablar pero Blaise la interrumpio primero.

– Con mucho gusto señorita – y sin más se la llevó a rastras mientras yo me reía.

Estaba riendo viendo a Blaise y Pansy bailar por qué ella me miraba feo y estoy segura de que me insultaba por la forma en que movía los labios pero yo simplemente sonreía y le mandaba besos.

– Weasley– me llamo alguien, voltee a mi lado para ver quién era y quién se había sentado junto a mi.

– Cormac– lo saludé con una falsa sonrisa.

Cormac McLaggen y sus amigos desde que llegué a primer grado fueron los primeros en molestarme, solo hace poco dejaron de hacerlo pero me enteré que ahora molestaban a una Ravenclaw.

Supongo que la conoceré luego.

– ¿O como debería llamarte? No pareces una Weasley para nada–

– Llámame Isabella y ya no le des mucha importancia–

– ¡Como de que no! Eres más hermosa de que lo que eras y te vez incluso sexy– susurro.

– ¿Ya no me veo tonta McLaggen?–

– No, todo lo contrario, ¿Quieres bailar?–

– No gracias, estoy bien–

– ¿Que tal si salimos afuera?–

– Hace frío McLaggen, no me quiero congelar gracias–

– Puedo prestarte mi saco–

– Me duelen los pies–

– Bueno al menos aceptame una bebida ¿Quieres?–

Suspiré con cansancio si que este tipo es insistente además de insoportable.

– Si te digo que si ¿Me dejarías en paz?–

– Por supuesto–

– Bien tráeme una estúpida bebida McLaggen–

Un destino que estoy obligada a tomarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora