Un destino que estoy obligada a tomar

Capitulo 32

                      Narra Isabella

Despues de que Mattheo me pusiera como un tomate en el desayuno y muchas burlas por parte de Blaise y Pansy, caminamos hacia clase de Defensa contra las Artes Oscuras que daba el profesor Alastor Moody.

Camine con mis amigos y nos sentamos en nuestros asientos, deje a los tortolitos juntos y me senté al frente junto a Harry que me dedico una sonrisa y yo una a el.

¿Que si he pensado en lo que había dicho Blaise sobre que Harry está enamorado de mi?

Si lo he pensado y la verdad es que no me gustaría que arruinaramos nuestra amistad, yo lo aprecio mucho.

– Hola Isa ¿Cómo estás?– me pregunto.

– Estoy muy bien gracias– le contesté.

– Lo del Torneo fue... impresionante–

– Lo se, cuidado Harry que te quito el puesto– bromee.

– Si creo que tengo que cuidar mi puesto– siguio la broma.

Los dos reímos y después nos quedamos en silencio, notaba a mi amigo algo nervioso.

– Amm, oye Isa, les hablaron sobre el ¿Baile?– pregunto.

– Si una tontería– bufé

– Si es algo nuevo... Verás me preguntaba si tu-

Nuestra conversación se vio interrumpida por un ruido de un metal chocando contra el suelo. Y era la pierna del nuevo profesor.

– ¿Porque tiene una pierna de metal?– escuché preguntar a Seamus.

– En una de sus cazas, un mortifago le lanzó un fuerte hechizo que le hizo perder la pierna– le contesto Ron.

– Alastor Moody– dijo el mientras escribía en la pizarra – Ex cazador, ministros inconforme y su maestro de Defensa Contra las Artes Oscuras, vine por qué Dumbledore me lo pidió, fin de la discusión, ¿preguntas?– dijo el molestó.

La verdad es que con ese modito que se carga no me dan ganas de pregúntarle algo. Y creo que los demás también compartieron ese pensamiento conmigo porque nadie se atrevió a preguntar.

– Bien, cuando se trata de Artes Oscuras aplicó el método práctico, pero primero¿Alguien me puede decir cuantas maldiciones imperdonables hay?– pregunto.

Algunos jadearon sorprendidos por tocar ese tipo de tema.

– Tres señor– respondió Hermione.

– ¿Por qué se llaman asi?– volvió a preguntar.

– Por que son imperdonables, si un mago- la interrumpió el profesor.

– Se ganaría un boleto directo a Askaban correcto, dicen que soy muy jóvenes para ver sus efectos, yo opino lo contrario debería de saber a lo que se enfrentan, y necesitan estar preparados y creo que necesita otro lugar para colocar su chicle señor Finnigan– dijo el y le aventó el borrador.

– Es increíble creo que ese loco puede ver de espaldas– dijo Seamos.

– Y escuchar también, ahora ¿Con cual empezamos?– observó todo el salón – Weasley– gritó.

– ¿Si?– pregunto Ron. El profesor me miró y yo lo mire.

– De pie– exclamó el.

Ron se puso de pie.

– Mencioné un maléfesio– dijo

– Mmm, bueno mi padre hablo sobre uno, el maleficio imperius–