Un destino que estoy obligada a tomar

Capitulo 33

                     Narra Isabella

Me dirigía a la oficina de mi padrino y como era una costumbre para mí entre sin tocar el iba a regañarme pero al verme nerviosa prefirió ahorrarse el regaño.

–¿Que pasa Isabella?– pregunto.

– Padrino, ese maestro está ¡Loco!– dije alterada.

–¿De quien hablas?– pregunto.

– Del tuerto que le falta un ojo y una pata– le dije.

– Pierna Isabella es pierna no "pata" no es un animal–

– Pues es igual a ellos, bueno no tanto así pero se comporta como un demente ¡Merlin! Somos niños de 4 grado–

– Siéntate y explícame que paso y por favor cálmate que me estás empezando a alterar a mi también–

Obedecí y me senté frente a el.

– Bien ahora explícame que te paso mientras te preparo un te– dijo levantándose y llendo a prepararlo.

– Estaba en clase de DCAO y el loco del maestro se le ocurrió la magnífica idea de enseñarnos las maldiciones imperdonables y no solo enseñarlas explicándolas si no poniéndolas en práctica–

–¿Uso a algún alumno?–

– No uso una araña pero daño a más de un niño mentalmente, más con esa maldición crucio–

– Isabella el es el maestro y bueno el director Dumbledore lo busco el sabe lo que hace–

– Pues tal vez no¿Cuántos años tiene?– pregunte.

– Isabella–

– Ya ya... Pero es que no quiero que el me de clase y menos con esas maldiciones que tal si es igual que en Durmstrang– le dije temerosa.

– Isabella se que no quieres hablar de tu estadía allí, y quiero suponer que es lo que te paso para que te pongas así, pero aquí nadie te ara daño y está prohibido hacer eso con los alumnos, tienes que estar tranquila–

– No padrino tengo un mal presentimiento sobre ese maestro y además mi abuelo no se ha comunicado conmigo y aveces me siento completamente sola– le dije.

El se acercó a mi con la taza de té en las manos y me la entregó, se sentó al lado mío.

– Tu nunca estás sola Isabella, tienes a muchas personas que te quieren y están a tu alrededor, principalmente a mi–

– Si pero aveces siento que todo lo que esta pasando a mi alrededor es más fuerte que yo y tengo miedo de dejarme caer y no poder luchar, estoy cansada, descubrir muchas cosas en tan poco tiempo, saber que mi madre murió por mi, que mi padre ni siquiera me quiso, la familia que juraba tener no lo es al menos no sanguínea, las malditas pesadillas sobre todo lo que pasó en Durmstrang, el maldito de Stefan aquí, el maldito Torneo en el que no quería estar, me siento agotada tanto mental como físicamente– solté en lágrimas, necesitaba hablar con alguien sobre esto.

– Escuchame bien Isabella, no has tenido una vida fácil lo entiendo, tienes muchas cosas en la cabeza en este momento, pero no tengas miedo, como dije así como tienes muchos problemas tienes muchas personas que te quieren, tienes a tus amigos que aunque pocos, son leales, eres una niña muy fuerte Isabella no dejes que todo esto sea más fuerte que tu–  dijo abrazándome.

Me aferre a el aún llorando y pensado en todo lo que me dijo. Y tiene razón tengo que ser fuerte por todas las personas que me quieren y se mantienen a mi lado, que nunca me han abandonado y que siempre tienen fe en mi.