Capitulo 23

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Las nubes se tomaron el cielo completo y un trueno aviso que ya la lluvia caería En cualquier momento. Lucas y Charlotte iban muy adelante casi no veía su auto desde allí, mire el reloj de mi muñeca y este tenía ya pasada las siete, el sol no se miraba ya. Mi teléfono sonó avisando que mi mamá estaba llamando así que lo cogí.

"—Mama, como vas ya voy en camino."

"—Ten cuidado hija, aquí está lloviendo desde la tardez, yo sigo en la construcción."

"—Te aviso en lo que entre al pueblo cuídate tu también."

"—Cuidate hija te quiero."

"—Yo igual."

Colgué la llamada y Aarón me miró serio.

—¿Tu madre está preocupada?.—me dijo.

—Si ella es muy protectora conmigo. —este asistió, otro trueno tomo el cielo y la lluvia comenzó.

—Tengo que bajar un poco la velocidad por la lluvia. —las gotas de lluvia caían fuerte en el techo del auto y la vista se complicó un poco, pareciera que una tormenta estaba cayendo.

—Si está bien. —me quedé viendo como los parabrisas limpiaban el agua del vidrio delantero.

—Si sigue así tendremos que parar es muy peligroso manejar así, podemos perder el control, marca a Charlotte que no los veo. —yo asisti y saque mi teléfono marcando a Charlotte.

"—¿Olle por donde van que ya no los vemos?."—le pregunte a penas contestó.

"—Ya pasamos la ruta siete dos, Pero la lluvia está fuerte, creo que vamos a para más adelante a ver si se calma un poco." —el teléfono lo puse en altavoz y Aarón me asistió con la cabeza.

"—Nosotros también nos vamos a detener, Aarón me dice que es peligroso manejar así, me avisas cualquier cosa.“— asitio y finalizamos la llamada.

—A un kilómetro hay una gasolinera, allí podemos parar y esperar que pase la lluvia. —me aviso Aarón.

—Si está bien. — el aire se puso frío y yo me maldije por no llevar un suéter o una chaqueta, pero bueno quien pensaría que lloveria así.

Al cabo de unos minutos se pudo divisar la luz de la gasolinera y Aarón se acercó todo lo que pudo, pero igual el agua caía a chorros, apagó el auto y miró en todas direcciones.

—Tendremos que esperar aquí, espero que no te moleste. —¿molestarme a mi?, estar encerrada en un auto con el, lo menos que hacía era molestarme. Lo que si era una tentación a terminar lo del cine.

—No está bien. —mire por la ventanilla y en la tienda de la gasolinera había luz en los letreros de abierto. Mire todo a nuestro alrededor y solo pude divisar, la gasolinera y unos trailers aparcados a su costado derecho. —Enciende la radio a ver qué dicen. —le propuse.

—Si buena idea. — encendió la radio y en esta estaban pasando música suave, pero al cabo de unos minutos un boletín informativo la interrumpió, avisando que la lluvia sería torrencial por al menos seis horas, que no se debía conducir así, que las personas se resguardarán mientras pasaba y se mantuvieran alerta, Aarón me miró y la apagó.

—Esto será para rato. —le dije.

—Si debemos ir a la tienda y ver si podemos quedarnos allí, por el auto no es cómodo y está comenzando a hacer frío y debemos comer algo. —propuso.

—¿Tienes algo para taparnos?, porque yo no.

—No tengo nada, vamos a tener que correr, porque el auto no entra hasta allí, toma tu bolso. —yo asistí y agarre mi bolso.

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