Capitulo 44

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Corrimos todo lo que pudimos ocultandonos de aquel desastre que era la fábrica, el ambiente parecia sacado de una serie policial. Lucas nos dijo que el auto estaba ocultando en una de las casas principales, a la cual Aarón nos dirigió

El se miraba adolorido y su herida del hombro me preocupaba mucho, necesitaba que un medico lo viera, Pero en estas circunstancias era muy complicado ir a un hospital, porque nos harían preguntas y más en el estado que estamos, con sangre y golpes.

Llegamos a un auto negro oculto a un costado de la casa y le pedí las llaves, así como estaba no lo dejaría conducir.

—Asi no vas a conducir, yo lo hago. —este nego con la cabeza.

—Ni loco, no quiero morir hoy, ya tuve mucha adrenalina está noche. —sono divertido, a pesar de lo mal que estaba todo, el sonrió, una sonrisa que me lleno el corazon de brinquitos.

—Prometo no matarnos. —le arrebate las llaves y me adentre al asiento del piloto, mirando un bolso sobre el asiento del copiloto lo tome y Aarón subió al auto.

—Pasemos a mi casa, debo ir con mi mamá. —yo asistí y salí de aquella casa en construcción y fuimos a su casa, yo también quería pasar por la mía y buscá mis cosas.

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Dijeron que todo había acabado, que yo estábamos a salvo de todo. Pero ir a mi casa y guardar todo en la maleta subirlo al auto y esperar por muchos minutos a que Aarón saliera de su casa se me hizo extraño, había pasado mucho tiempo ybno salia aún.

Revise el bolso que encontré en el auto y este tenía dinero, un teléfono y una carta, una que tenía mi nombre, Pero no me atrevía a abrirla todavía.

Mire la casa de Aarón y me hizo sentir miedo. Miedo de que en ese lugar alguien los estuviera esperando, de que lo hubieran atacado, así que con manos temblorosas me acerque a la puerta de entrada, la cual estaba abierta y entre, siendo recibida por un silencio sepulcral.

Aarón no se miraba por ningún lado, la casa tenía algunas luces encendidas y estaba todo quieto. Así que decidí subir a la habitación de Aarón quizás todavía guardaba cosas.

Subí las escaleras y pasé por la primera puerta, aquella que tenía la luz encendida y la puerta medio abierta. Al pasar ví que había alguien de espaldas hacia la cama, como mirando la figura que dormía en la cama, me adentre un poco más y era Aarón, el estaba observando la cama, sus manos estaban en puños y su postura rígida, mire la cama sintiendo mi corazón detenerse, aquella figura no se movía, no respiraba y tenia en las manos algo agarrado.

Yo me detuve a un lado de Aarón y este tenía la vista como perdida, estaba en shock. Yo mote su brazo y lo hice mirarme a mi, tomando su mejilla con mi mano.

—Mirame, Aarón mírame. —y lo hizo, me miró, Pero su mirada estaba apagada.

E-lla, no...—las palabras le salieron en un susurro, yo mire de nuevo la cama y me acerque, haciendo valor de aguantar aquello. Toque su piel y estaba fría, muy fría, seguro tenía horas muertas, su piel estaba mas palida de lo normal y su boca un poco abierta. Tenía una de sus manos agarrando su pecho, allí donde va su corazón.

—Lo siento, no podemos hacer nada. —mire lo que tenía el sus manos y era una foto de ella y Aarón de niño, eso me dolió mucho, saque la foto con cuidado y se la tendí a el. —Fue un infarto por la forma en la que está. —le señale la mano y la boca. —Tenemos que irnos, yo le aviso a mi mamá que venga por ella, no podemos quedarnos.

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