Gyo miró entre el niño y su prometida luego de escuchar su nombre. C-cómo dices que te llamas? Tawin lo iba a repetir, pero su madre lo interrumpió. Rocio, puedes decirle a Marcos que cuide de Tawin mientras yo hablo con mis amigas? Le alborotó el pelo. Pero yo también quiero saber el chismecito. La madre se rió de las ocurrencias de su pequeño. La tía Ro siempre dice que el chisme y el dinero se hicieron para contarse. Rocío le tapó la boca al niño soplón.
Príncipe, mejor no digas más nada. Le voy a pedir al tío Marcos que te lleve a desayunar mientras hablan los adultos. Tawin brinco emocionado olvidando momentáneamente a su madre. Waffles y tocineta?! Las 3 se rieron. Claro que sí, pero también tienes que comer algo de frutas. Tawin hizo un puchero. Si me entero que solo comiste waffles y tocineta, ya verás. Rocío le apuntó con un dedo.
Tawin? El chico miró a su madre recordando que estaba allí. ¿Me vas a cambiar por unos waffles así de fácil? Tawin se lo pensó un segundo. Bueno... Manaow alzó la ceja. No, obvio no. Es que son mis favoritos. Tawin corrió hacia ella y prácticamente se le tiró encima. Rocio y Gyo se movieron a la vez para sacarlo de ahí antes de que lastimara mas a Manaow, pero ella les hizo una señal para que se detuvieran. Manaow susurro algo en su oído que lo hizo reírse y luego besó su mejilla. Cuando Tawin se bajó de la camilla, Manaow soltó el aire que estaba aguantando por el dolor. Rocío se lo llevó del cuarto. E-estas bien? Gyo pregunto al ver el rostro adolorido de Manaow. Si, no te preocupes. Ya apreté el botón de la morfina. Pronto hará efecto. Se quedaron en un silencio incómodo mientras esperaban al resto del grupo que venían seguidos por la doctora.
Señorita Siridawong, tiene que descansar. No puede haber tantas personas en la zona de intensivo. Manaow acomodó su cabeza en la almohada. Solo necesito unos minutos y luego de eso descansaré. La doctora miró al grupo resignada. Está bien. Volveré dentro de un rato para asegurarme de que cumpla con su palabra.
Jaojom fue el primero en hablar. Te ves horrible. Manaow se burló. Tienes suerte que no puedo hacer mucho esfuerzo sino te pegaba una patada en el trasero. Ambos se ríen. Guarda esa actitud para nuestro próximo juego de tenis. Quizás logres ganar. Manaow giró los ojos.
Gracias por venir. Se chocaron los puños. No me tienes que agradecer. Tengo que aprovechar que por fin me veo más guapo que tú. Jaojom acarició su barbilla e hizo una pose. Lada lo abrazó. Baby, con todo y rasguños Naow se ve mejor que tú. Las chicas se rieron. Se ve muy sexy incluso con esa fea bata de hospital. Jaojom hizo un puchero. Lada se encogió de hombros y le dio un beso. Warang se movió detrás del grupo evitando la mirada de Manaow.
¿Y tú qué haces aquí? Manaow preguntó genuinamente sorprendida fijándose que también Prang estaba allí. Yo... Manaow sacudió la cabeza levemente. Ese no era el momento. El cansancio estaba ganando la batalla. Rocío entró en la habitación nuevamente. Ya deje a Tawin con Marcos. Sin tener que pedirselo, caminó hacia Manaow y agarró su mano entrelazando sus dedos, acción que no pasó desapercibida por Gyo. Perfecto porque no quiero que escuche esto.
¿Estás segura de que quieres decirlo? Manaow nunca habló del tema con nadie que no fuera la policía. No tienes que contarnos si no quieres, Manaow, dijo Suay. Los demás asintieron. Quiero hacerlo. Manaow miró a Gyo fijamente. Te dije que quería ser honesta contigo antes de que nuestra relación fuera más allá y lo voy a hacer aunque no quieras estar conmigo después de lo que vas a saber. Manaow se aclaró la garganta.
¿Quieres un poco de agua? Gyo no esperó la respuesta y le sirvió agua en un envase que estaba al lado de la camilla entregandoselo. Gracias. Manaow tomo un poco de agua y se fijó que Devi, Mercedes y Lawan estaban paradas en una esquina sin decir nada. Pueden acercarse, no muerdo, bromeó la chica. Devi se notaba incómoda. No me gustan mucho los hospitales. Me dan un poco de ansiedad. Mercedes puso sus manos en sus hombros para ayudarla a relajarse. Manaow sonrió al ver la interacción. Sabia que debía disculparse con Mercedes, pero ese no era el momento.