You don't own me [Jungkook] [Terminada].

[25] Nada.

Jungkook.

— ¡Jungkook!— gritó mí nombre.

Era algo que nunca hacía, siempre me llamaba idiota, estúpido, asqueroso, grosero, pero nunca Jungkook.

Paré en seco y me quedé estático mirando a un punto fijo en el pasto.

— ¡¿Por qué te enojas?!— escuché como se acercaba a mí por el sonido que provocaba el pasto con los zapatos de Ami—. No te entiendo...

— Está claro que no me vas a entender. No te sientes igual que yo— me giré—. A esta altura no se qué somos. Quédate con tu Park— escupí con odio y la dejé allí sola mientras me iba corriendo con ganas de llorar.

No sé cómo me sentía.

Solo se que estoy muy molesto, al punto en el que quiero tirar las cosas al suelo y romperlas.

Park Jimin, un "amigo" que conocí cuando llegué a mí nuevo hogar.

¡Ahg! No sabía que hacer.

En lo más profundo de mis pensamientos sabía que Jimin había visto primero a Ami, en todo caso el tenía ventajas y privilegios al haberla conocido primero.

Pero si tan solo ellos no se hubieran conocido, es más... Si tan solo Jimin no hubiera mencionado con tanto furor que la conocía, tal vez no estaría tan consternado y molesto en estos momentos.

2016.

— ¿Ami?— solté confundido hacía Taeyang.

— Sí, adopté a una niña extranjera— me tiró una fotografía de ella.

Era linda.

Pero ahí fue cuando escuché la sorpresa de Jimin.

— ¡¿Ami?!— me arrebató la foto.

— ¿La conoces?— asintió con lentitud.

Por la mirada de odio que esté le dió a Taeyang más la sonrisa victoriosa que él mayor tenía, supe que había gato encerrado aquí.

Fragmento de Park Jimin.

— Acepto— me levanté de la silla.

— ¿Cómo se que no me traicionarás?— el señor Taeyang se levantó y se puso al lado mío.

— Prometí no hacerlo, confíe en mí—. Sonreí.

— Eres tierno, niño— acarició levemente mí cabeza.

— Gracias señor es un honor poder trabajar con usted— no podía controlar mí nivel de felicidad.

Iba a ganar muchísimo dinero, con solo tener vigilado a un tal Jungkook y así podía sacar a Ami de ese asqueroso orfanato y darle la vida que se merece.

Pero eso era lo que pensaba unos meses antes.

Sabía que Taeyang no era bobo, y que él tenía presente en que al no tener de dónde apresarme podía traicionarlo o simplemente desobedecer.

Entonces fue por esa razón que adoptó a Ami y ahora me tiene como su esclavo, atormentandome cada vez que puede sobre Jungkook y su comportamiento.

No podía huir.

Flashback.

— ¡¿Por qué?!— golpeé la mesa con mí puño causando un gran estruendo.

— Calma, calma— hizo un ademán con su mano algo despreocupado de la situación.

— ¡¿Qué me calme?! ¡¿Qué mierdas hace Ami aquí?!— grité histérico.

— Ya ves que es mí hija, entonces debía traerla a mí casa. ¿Algún problema con eso?— sonrió—. Oh... Cierto. Ella es tu debilidad... Olvidaba que estabas enamorado de ella— soltó en medio de una carcajada—. Muy bien Park Jimin ahora sí cerramos contrato, ahora sí puedo cobrar si me desobedeces.