ACLARACIÓN: esta es la versión editada (más info en la primera parte).
Peter Parker, un adolescente de 15 años, no puede creer su suerte el día que el multimillonario Tony Stark, también conocido como Iron Man, se presenta en su casa para ofrecerle...
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✨PRÓLOGO.
28 de Agosto de 2001 - Malibú, California.
Música fuerte y el sonido de unas ruedas girando rápidamente en el pavimento eran lo que Tony escuchaba, el magnate se dirigía a toda velocidad en uno de sus autos último modelo a un pub, en busca de diversión, con diversión se refería a beber alcohol y tratar de ligar con alguna joven linda, Tony era demasiado mujeriego, era muy usual en él tener conquistas de una sola noche.
El millonario estacionó su lujoso vehículo en la playa de estacionamiento del pub al que había decidido ir aquella noche, se bajó del auto, cerró la puerta y le puso la alarma, luego se acomodó su campera de cuero y se dirigió a las puertas vidriadas de acceso del pub.
Apenas ingresó notó la cantidad de gente que había en el lugar, bailando al son de la música y las luces de colores que se movían en todas direcciones, Tony sonrió, amaba esa clase de lugares, se llevó una mano a la frente y se sacudió su negro pelo hacia atrás, robando suspiros de parte de algunas jóvenes que estaban cerca de él.
Tony no sólo llamaba la atención por su atractivo, sino también por su fama, era el famoso Tony Stark, sucesor de su padre, Howard Stark, en Industrias Stark.
—Señor Stark, buenas noches.—Lo saludó una joven rubia de ojos azules, colocándose a su lado mientras agarraba uno de sus brazos y le ofrecía una sonrisa seductora.—¿Quiere bailar? me llamo Mindy.
Tony esbozó una sonrisa forzada, luego sujetó las manos de ¿Mandy? ya había olvidado su nombre, y se las sacó con delicadeza del brazo.
—Lo siento Mandy, la verdad es que me apetece un trago en estos momentos, no bailar contigo, no te ofendas, no es nada personal.—Dijo haciendo un gesto de indiferencia con su mano y retirándose rápidamente en dirección a la barra.
Okay, quizás Tony había mentido un poco, no sólo quería un trago sino ligar con una chica distinta, esa rubia no había sido lo suficientemente despampanante para captar su atención.
—Un vaso de soda por favor.—Le pidió una joven al barman, ella estaba sentada en uno de los taburetes frente a la barra.
Su voz había dejado encantado a Tony, pensó "pero que voz más suave", sin pensarlo dos veces, se dejó caer en el taburete libre que estaba al lado de esa joven, Tony la analizó con la mirada, era hermosa, tenía el pelo entre rubio y rojizo, claro, ojos azules y facciones delicadas.
—Yo quiero dos martinis bien cargados, con extra hielo y extra rápido.—Le avisó Tony al barman que acababa de atender a la joven, mientras levantaba la mano para captar su atención, una vez que el barman lo vio, arrojó un billete en su dirección.—Uno para mí y otro para la señorita.—Especificó mirando a la joven, que lo miraba con la boca abierta, sorprendida.
El barman asintió y se retiró.
—Eres... eres Tony Stark.—Musitó la joven en un hilo de voz.
