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Había pasado el fin de semana con mis chiquitos y no había nada más increíble que eso, me quedé cargado de energías para comenzar mi semana con todo. El lunes a primera hora llegó Kendall a Philly, con quién estaba teniendo una graciosa y divertida aventura, a medida que la iba conociendo me sorprendió bastante, siempre pensé que todas ellas eran mujeres extremadamente superficiales que se ocupaban solo de verse lindas, pero me fui sorprendiendo bastante, además no podía quedarme esperando que Lali regresara a casa, no iba a pasar, ella estaba dando vuelta la página con un charlatán fanático de la política.

​​​​​​—¿Te estás peleando con el presidente? ​​​​​​—dijo Kendall mientras terminábamos de tomar desayuno

​​​​​​—Está jodiendo a Lali ​​​​​​—dije bloqueando mi celular​​​​​​— Desde que Lali hizo una opinión sobre el nunca más la dejó en paz, pero no me gusta lo que hace, la usa de blanco para decir estupideces y luego todos esos tontos que lo siguen la atacan sin parar, me pone nervioso porque sé que esos tipo que son fanáticos son capaces de hacer cualquier cosa, le puede pasar algo a ella o a mis hijos que están ahí

​​​​​​—Sí, es peligroso ​​​​​​—dijo ella

​​​​​​—¿Lo votaste? ​​​​​​—pregunté​​​​​​— Tienes cara de haberlo votado

​​​​​​—No, no lo voté porque también me parece un tipo peligroso, dios que prejuicioso eres, primero me dijiste que me pensabas de superficial, luego te burlaste de mi colección de autos, ¿qué onda? ¿Piensas que soy una mina vacía? ​​​​​​—dijo riendo

​​​​​​—Si pensara eso no estaría contigo ​​​​​​ahora—respondí con seguridad

​​​​​​—Que guapísimo estás por favor ​​​​​​—se puso de pie y se sentó en mis piernas​​​​​​— Entiendo perfecto toda esta movida de ser un hombre separado con hijos, pero quiero que hagamos más cosas, supongo que tu no le debes nada a ella a esta altura, porque ella va a cenar con su novio y todo el mundo lo sabe ​​​​​​—agregó con seguridad y asentí​​​​​​— Porque no podemos viajar y hacer más cosas?

​​​​​​—Porque estoy en temporada ​​​​​​—dije con una sonrisa

​​​​​​—Cierto, el novio de mi hermana quiere venir al partido ​​​​​​—agregó mientras me acariciaba ​​​​​— Hay un problema con eso

​​​​​​—No, puedo conseguirles un buen lugar ​​​​​​—agregué pensando en el VIP de tincho que estaba al lado del mío​​​​​​— No sé si vienen mis hijos al juego entonces ellos estarán ahí con la familia de Lali que siempre vienen, pero yo puedo conseguir un lugar perfecto para ustedes también, ¿no quieren venir tus otras hermanas?

​​​​​​—No, no te quiero presentar aún oficialmente porque aun me puedes romper el corazón, lo mejor es que solo te conozca Kylie ​​​​​​—dijo riendo​​​​​​— Además que mi mamá va a comenzar a interrogarte, va a querer que venga con una cámara acá para que le dé contenido a su programa ​​​​​​—dijo tentada​​​​​​— No, dejemos así, te las presento cuando sea tu novia ​​​​​​—la miré con una sonrisa, no sabía que decirle, sinceramente no me imaginaba de novio por lo pronto

​​​​​​—Yo... Sabes que me separé hace poco y ahora estoy como en un proceso de volver a entender todo esto, puedo ofrecerte diversión Kenny ​​​​​​—dije riendo

​​​​​​—Que aburrido, no te estoy pidiendo que seas mi novio ahora, fue un decir ​​​​​​—dijo sonriendo y me acarició​​​​​​— no te preocupes por mi Lanzani, no soy una mujer loca como todo el mundo dice o me juzga por mis hermanas, soy una mina mucho más simple, que siempre le ha gustado disfrutar de la vida, a mi me gusta pasar tiempo contigo

Un amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora