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Peter viniendo a la ciudad solo a decirme que estaba haciendo terapia era considerado un atentado emocional, no podía sacarme de la cabeza la cara que tenía, dos minutos más y yo me olvidaba de hacerme la dura y volvía con el Philly, tampoco me podía comportar de esa manera, tenía hijos que estaba moviendo de un lugar a otro, tenía que ser una mujer adulta aunque me estaba costando trabajo, mientras tanto en los medios estaban inventando un montón de cosas sobre mi "relación"

—Tengo que decirte algo que quizás no te va a gustar —me dijo Eugenia, guardé mi celular y la miré— Estoy comenzando a sospechar que todos estos rumores falsos están saliendo del mismo círculo de Pedro, porque ya me parece raro que inventen tantas cosas con alguien que no es importante en los medios

—Lo pensé —dije con una leve sonrisa— Yo no desconfío de él porque me parece buen chico, no lo veo capaz de decir esas cosas, pero si pensé en que cercanos a él puedan estar diciendo esas cosas, capaz como para mover el programa, son chicos jóvenes, es un equipo joven

—Todo bien con que quieras coger y divertirte, lo apoyo siempre, pero como tu publicista, no apoyo que te expongas a este tipo de cosas, me parece que ya no estas para lidiar con este tipo de dramas, tu eres una mujer de años de carrera, madre, que tiene otro nivel, otras obligaciones, ya no estamos para joder con estos niñitos, esto es un último aviso Mariana, si sigue la situación, iniciaré una investigación y acabaré con ese programa —dijo con seguridad

—¿Sabes si Peter habló con Bella? —preguntó, me miró tentada y cerró su computador

—Hablan casi todos los días, Peter va a conocer al novio de Emi esta semana y le estaba pidiendo consejos para no ser un cavernícola, me da mucha ternura, es un hombre que creció acompañado de su abuelo, se nota demasiado —dijo Euge sonriendo— ¿Que onda ese día que vino?

—Está haciendo terapia —respondí sonriendo— Me sorprendió, sé que es algo que le cuesta un montón, así que es un avance importante, aunque esto suene enfermo —miré a Eugenia— Quiero que entienda en las cosas que se equivocó, que aprenda y que pueda expresar lo que siente, pero no quiero que lo cambien —Euge comenzó a reírse— No quiero que deje de ser una persona que se cree dueña del mundo, es su esencia

—No va a cambiar, la terapia no es para eso, es para ayudarte con tus problemas personales, me alegra mucho que Peter haya decidido buscar ayuda, es algo que necesitaba un montón, no es lo mismo que los especialista del club te digan que todo está bien, obviamente que para ellos todo tiene que estar bien, es el jugador que necesitan en el campo —dijo Euge con seguridad— ¿Lo extrañas?

—Sí, pero me da bronca que hizo todo esto cuando ambos conocimos a personas, cuando yo me fui de Philly, no entiendo porque tenía que esperar que yo me fuera de casa para recién darse cuenta que las cosas estaban así de mal, ahora también entiendo que tengo parte de responsabilidad en eso, éramos una pareja —dije pensando— Pero también estaba cansada de arrastrarme todo el tiempo hacia ese maldito futbolista

—Bueno, tú sabías perfectamente de quién te estabas enamorando querida, no te hagas la sorprendida —dijo mi amiga con una sonrisa— Espero que lo que venga sea lo mejor para ustedes y que ambos recuerden que no pueden seguir siendo adolescentes porque ahora no solamente se lastiman el uno al otro, también lo hacen con los chicos

—Lo sé, es lo que más me preocupa de todo esto —respondí con el celular en la mano— No quiero que Peter piense que tengo planes con este varón, ¿qué hago? Si me pongo a desmentir todo Pepe se va a enojar conmigo

—Decídete mamita, no puedes tener todo —respondió

—Te odio —respondí— ¿Cómo hacías cuando estabas de novia con Bella y Dua te cantaba todas esas canciones de amor? —preguntó— ¿Qué se sentía?

Un amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora