La siguiente mañana, la atmósfera en el circo era densa y cargada de tensión. Taehyung, aún nervioso por las acusaciones de Nico, sabía que debía ser extremadamente cauteloso. No podía permitirse ningún error. Sabía que cada movimiento sería observado de cerca por Jungkook y sus seguidores.
Jungkook convocó a todos a la carpa principal. La reunión tenía un aire ceremonial, con todos los miembros del circo alineados en un semicírculo alrededor del escenario. Taehyung se encontraba en el centro, el foco de todas las miradas.
Jungkook subió al escenario, su presencia imponente y autoritaria. "Hoy, Taehyung tendrá la oportunidad de demostrar su lealtad al circo," anunció, su voz resonando en el espacio. "Esta prueba no solo determinará su futuro aquí, sino que también servirá como recordatorio para todos nosotros de que la lealtad es lo más importante."
Eva, siempre teatral, se adelantó y extendió un brazo hacia Taehyung. "Querido, tu tarea es simple pero crucial. Debes enfrentar tus propios miedos y mostrar tu compromiso con nosotros. Solo entonces podremos confiar en ti."
Taehyung tragó saliva, su mente trabajando a toda velocidad. Sabía que no podía fallar. Observó a los miembros del circo, sus rostros una mezcla de curiosidad y escepticismo. Tenía que encontrar una manera de ganarse su confianza mientras seguía buscando una oportunidad para escapar.
Jasper y Julián se acercaron, llevando una caja de madera pesada. La colocaron frente a Taehyung y la abrieron, revelando una colección de cuchillos afilados y herramientas de tortura. Taehyung sintió un nudo en el estómago al ver los instrumentos de dolor.
"Tu prueba será enfrentar a este prisionero," dijo Jungkook, señalando a un hombre encadenado al otro lado del escenario. "Este hombre ha intentado traicionarnos. Quiero que le muestres lo que sucede con los traidores."
Taehyung se acercó al prisionero, su corazón latiendo con fuerza. Sabía que esto era una prueba de fuego. Si mostraba alguna señal de debilidad, estaría condenado. Tomó uno de los cuchillos y se acercó al prisionero, tratando de mantener su mano firme.
El prisionero, un hombre de aspecto desaliñado y ojos llenos de miedo, suplicó por su vida. "Por favor, no... No me hagas daño..."
Taehyung sintió una oleada de compasión, pero también una voz en su interior que le decía que tenía que hacer esto para sobrevivir. Respiró hondo y levantó el cuchillo, dirigiéndolo hacia el prisionero. Pero en el último momento, se detuvo.
"Jungkook," dijo, volviéndose hacia el líder del circo. "Este hombre ha fallado, pero creo que hay una manera mejor de demostrar mi lealtad. Dejadme demostrar mi compromiso de otra forma."
Jungkook levantó una ceja, intrigado. "¿Y qué propones?"
Taehyung respiró profundamente. "Déjame someterme a una prueba de resistencia y lealtad. Algo que demuestre mi dedicación y mi capacidad para soportar el dolor por el bien del circo."
Jungkook observó a Taehyung durante unos largos segundos, luego sonrió ligeramente. "Muy bien, Taehyung. Acepto tu propuesta. Eva, prepáralo."
Eva aplaudió, encantada. "¡Perfecto! Una prueba de resistencia será mucho más entretenida."
Taehyung fue llevado al centro del escenario, donde Eva y los gemelos prepararon una serie de desafíos físicos y mentales diseñados para poner a prueba su resistencia y su voluntad. A lo largo de la prueba, Taehyung se enfrentó a torturas, privaciones y pruebas de fuerza que lo llevaron al límite de sus capacidades.
Cada momento era una lucha por mantener el control, por no ceder al dolor y al miedo. Pero Taehyung sabía que tenía que hacerlo, no solo para ganarse la confianza de Jungkook, sino para mantenerse vivo. Con cada prueba superada, sentía que se acercaba un poco más a su objetivo final: encontrar una manera de escapar.
Finalmente, tras horas de sufrimiento, Taehyung se derrumbó en el suelo, agotado pero aún consciente. Jungkook se acercó y lo levantó del suelo, sosteniéndolo por los hombros.
"Has demostrado una gran fortaleza y lealtad, Taehyung," dijo Jungkook, sus ojos brillando con aprobación. "Eres uno de nosotros ahora. Pero recuerda, la lealtad debe demostrarse todos los días."
Taehyung asintió débilmente, sabiendo que su lucha estaba lejos de terminar. Había ganado una pequeña victoria, pero el verdadero desafío estaba aún por venir. Mientras lo llevaban de regreso a su celda, una chispa de determinación ardía en su interior. Encontraría una manera de escapar de este lugar, no importaba cuánto tiempo le tomara.
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El circo de los secretos.
RandomEl sol se ocultaba tras el horizonte, tiñendo el cielo de tonos carmesí mientras la noche se cernía sobre el pequeño pueblo. Entre las sombras de los edificios, un rumor inquietante se extendía por las calles empedradas, anunciando la llegada de alg...