El circo de los secretos.

Capítulo 49: Propuesta de Paz

La atmósfera en la carpa principal estaba cargada de una tensión palpable. Los ojos de Eva brillaban con locura contenida, mientras que Jungkook y Hank se mantenían firmes, midiendo cada palabra y movimiento. Taehyung, observando desde las sombras, sentía cómo su corazón latía con fuerza, consciente de que cualquier cosa podía suceder en los próximos momentos.

Hank fue el primero en hablar, su tono calmado contrastando con la tensión en el aire. "Jungkook, todos sabemos que hay problemas que están afectando la armonía del circo," comenzó, mirando directamente a Jungkook. "Pero creo que hay una manera de solucionar esto sin causar más conflictos."

Eva resopló, cruzando los brazos sobre el pecho. "¿Y qué propones, Hank? ¿Otra charla sobre cómo debemos ser una gran familia feliz?" preguntó con sarcasmo.

Hank la ignoró, concentrándose en Jungkook. "Sé que hay preocupaciones sobre mi relación con Taehyung," continuó. "Pero puedo asegurarte que mi único interés es entrenarlo y ayudarlo a ser una parte valiosa del circo. Nada más."

Jungkook estrechó los ojos, aún desconfiado. "¿Y cómo piensas demostrar eso?" preguntó, su voz baja pero firme.

Hank dio un paso adelante, extendiendo las manos en un gesto de paz. "Propondré una tregua. Vamos a seguir con los entrenamientos, pero bajo tu supervisión. Puedes estar presente en cada sesión si lo deseas. De esa manera, no habrá malentendidos ni sospechas."

Eva rodó los ojos, pero permaneció en silencio. Jungkook consideró la propuesta, sus pensamientos corriendo a mil por hora. Sabía que sus celos y desconfianza estaban causando estragos, pero también entendía que necesitaba mantener la cohesión del circo.

"Está bien," dijo finalmente, su tono algo más relajado. "Acepto tu propuesta, Hank. Supervisaré los entrenamientos."

Taehyung, aún en las sombras, sintió una mezcla de alivio y aprehensión. Sabía que esto podría complicar aún más sus sentimientos hacia Jungkook, pero también entendía que era una oportunidad para demostrar su valía.

Eva se acercó, su expresión aún desafiante. "Esto no cambia nada," dijo, mirando a Jungkook y Hank. "Si veo algo que no me gusta, no dudaré en actuar."

Jungkook asintió, reconociendo la advertencia. "Lo mismo digo, Eva. Mantengamos el circo en paz."

Con eso, la reunión terminó, y cada uno se fue por su lado. Pero la tensión, aunque disminuida, no desapareció por completo. Hank se acercó a Taehyung, que había salido de las sombras, y le dio una palmadita en el hombro.

"Vamos a superar esto," dijo con una sonrisa tranquilizadora. "Confío en ti."

Taehyung asintió, sintiendo una renovada determinación. Sabía que el camino por delante sería difícil, pero estaba dispuesto a enfrentarlo.

Esa noche, mientras la lluvia continuaba cayendo sobre el campamento, Jungkook se quedó en su carpa, reflexionando sobre lo sucedido. Sus pensamientos volvieron a Taehyung, y la intensidad de sus sentimientos lo abrumó una vez más.

"¿Por qué no puedo dejar de pensar en ti?" murmuró para sí mismo, mirando la carpa donde Taehyung estaba durmiendo. "Tengo que encontrar una manera de manejar esto sin destruir lo que he construido."

En la carpa de Eva, ella y Nico hablaban en voz baja, planeando sus próximos movimientos. "Vamos a observar de cerca," dijo Eva, su voz fría y calculadora. "Quiero ver cómo se desarrolla esto. Y si surge la oportunidad, actuaremos."

Nico asintió, sabiendo que seguiría a Eva en cualquier plan que tuviera. La noche avanzaba, y el Circo de los Secretos se sumía en un sueño inquieto, con cada miembro consciente de las tensiones y los peligros que acechaban en las sombras.

El entrenamiento entre Hank y Taehyung continuaría bajo la atenta mirada de Jungkook, y con cada día que pasaba, las relaciones y los secretos dentro del circo se volvían más complejos. Pero una cosa era segura: la propuesta de paz de Hank había dado un respiro temporal, una oportunidad para que todos pudieran encontrar un equilibrio, aunque precario.