¿Y si NOS VOLVEMOS a ENCONTRAR?

34- Pau, Bajo el agua

Mi partida es inminente.

Ya está todo arreglado, en unos días volveré a la gran ciudad para ir por mis sueños. Son increíbles las vueltas que da la vida, llevaba desde chica queriendo vivir en Villa Carlos Paz para entonces descubrir que aquello que estaba buscando estaba en Buenos Aires. Son inimaginables las maneras que tiene la vida de darnos lecciones, de recordarnos aprendizajes y mostrarnos el camino. Como las personas que caminan junto a nosotros (más allá del tiempo) nos alumbran con su luz, siendo reflejos que nos acompañan a ver con mayor claridad.

Sin él no sé si podría haber comprendido que es la pasión, no sé si podría haberla sentido de nuevo en mi piel, bajo mis sueños, en mis ilusiones y esperanzas. Sin saberlo, me abrió un mundo desconocido, me ayudó a encontrarme, a soltar. Si, sobre todo a soltar, a limpiar todas esas capas respecto al "amor" que ensuciaban mi panorama sin darme cuenta.

Acostada en el suave y verde pasto de la costanera mientras mis manos se acarician. Contemplando el cielo celeste, intenso y limpio de la ciudad de Carlos Paz, escucho que empiezan a sonar los primeros arpegios de una guitarra junto a la voz de Manuel Medrano cantando "Bajo el agua", si nunca la escuchaste, deberías. Mi mente me lleva a ese último instante dónde sentí, que aunque no fuera lo que quería, todo se rompía.

🎶Quiero decirle al mundo
Que no somos amigos
Decirle a la tristeza
Que no se cruce en mi camino...🎶

Ese último instante dónde permanecí de espalda unos segundos, mire sobre mi hombro esos ojos celestes cristalinos que con el sol de la mañana reflejaban desde su iris pequeños rayos grises. En ellos había oscuridad, dureza y un destello de tristeza, de... ¿dolor?, o por lo.menos, eso quiero creer. Sonreí, como ahora, sin poder evitarlo, tratando de retener ese instante más allá de lo que sus palabras pudieran haber dicho. Aún con las lágrimas nublando mis retinas y el cosquilleo que picaba mi nariz, sonreí.

🎶Quiero volar contigo
Muy alto en algún lugar

Quisiera estar contigo
🎶Viendo las estrellas sobre el mar

Quiero encontrar, otro camino
Ponerme mi vestido
Y salir a caminar contigo...🎶

Sabía que sería la última vez que lo iba a ver en mucho tiempo, a golpes aprendí que mi intuición nunca falla. Entonces, a pesar del puñal de sus palabras o quizás lo que me decían sus ojos sin ellas, di un largo respiro dejabdo entrar la calma del aire a mis pulmones, y sonreí sintiendo que el alma se me llenaba al tiempo que se quebraba.

Quería abrazarlo una última vez, sentirlo una vez más en mi piel. Que mi amigo me dijera que todo iba a estar bien, que iba a estar acompañándome aunque no estuviera de acuerdo con mi decisión, pero sabía que en medio de su tormenta no me iba a dejar.

Entonces sonreí, me acerque rozando su mano, la misma que no dudó en alejar bruscamente, señal de que quería espacio, así que le di un húmedo y ruidoso beso en la mejilla, esos que sabía que detestaba y yo amaba darle porque esa versión de niño caprichoso enojado ya comprendí que son una de mis perdiciones... <<un beso de despedida>>.

Puede que no me quiera como yo a él, pero todo es por algo, todo es sumamente perfecto. ¿Si me arrepiento de la noche de pasión que pasamos juntos? No, claro que no, el broche de oro para todo lo que siento, para la mujer en la que me estoy convirtiendo y que he descubierto que soy, sin ella (más allá de lo que le haya resultado a él) no hubiera perdonado a esa niña que se quedó apegada al dolor, a la herida de que nadie le creyera su historia, a los miedos de ser rechazada y a todas las corazas que se encargó de armar para no dejarse llevar, para complacer a los otros buscando un poco de amor a costa de su propio placer.

🎶Pero tu, ayer cambiaste mi destino
Me diste vida

Mucha más vida que el vino
Me diste fuerza, en los días fríos🎶

Me diste ganas de extrañarte...
Sin ningún motivo...🎶

Sonrío al cielo junto a los últimos acordes del piano de una canción que siento que marca el comienzo de un final y un principio lleno de miedos pero de miles de ilusiones.

Sonrío, porque es gratis y ¡qué más da!, si la tristeza no la puedo evitar por lo menos recordarla bajo el reflejo del agua de lo que fue y el mundo que se abrió frente a mis ojos.

Sonrío, y vuelvo a la suavidad de aquel <<beso de despedida>>.