All my life (Soukoku)

26

Después de un día ajetreado organizando el evento escolar, Dazai y Chuuya finalmente podían tomar un merecido descanso. Dazai se encontraba recostado en las piernas de Chuuya, sintiendo la suavidad de las caricias que el pelirrojo le daba en la cabeza. Mientras tanto, Chuuya conversaba con Fyodor sobre un evento escolar reciente en el que Nikolai había participado.

Dazai, por su parte, trataba de no quedarse dormido. Las caricias de Chuuya eran increíblemente relajantes, y sentía sus párpados cada vez más pesados.

En ese momento, apareció Tachihara. — Hey, Dazai, ¿Puedo pedirte un favor? Necesito que me prestes a Chuuya por un rato.

Dazai bostezó y se estiró perezosamente. — Pregúntale a él, no a mí. — murmuró, disfrutando de la comodidad.

Chuuya miró a Tachihara con curiosidad.
— ¿Qué pasa, Tachihara?

— Necesito una pareja para la competencia de hoy. — explicó Tachihara. — Y como tú eres bueno en las competencias, pensé en pedirte ayuda.

Chuuya hizo un puchero. — Pero me da mucha flojera.

— El premio es una tablet y dos entradas al acuario. Necesito la tablet con urgencia para un proyecto, y si quieres, puedes quedarte con las entradas.

Chuuya frunció el ceño, pensativo. — ¿Realmente necesitas la tablet?

— Sí, realmente la necesito. —  respondió Tachihara, con un tono suplicante.

Chuuya miró a Dazai, que ahora lo observaba con una media sonrisa. — ¿Qué piensas, Osamu?

Dazai sonrió perezosamente. — Depende de ti, Chuuya. Pero las entradas al acuario suenan divertidas, ¿No crees?

Chuuya suspiró y luego se levantó, haciendo que Dazai se incorporara también. — Está bien, te ayudare, pero me debes una.

Tachihara sonrió, aliviado. — Gracias, Chuuya.

En ese momento, apareció Atsushi. — ¡Chuuya-san! Necesito su ayuda para la competencia.

Chuuya lo miró apenado y negó con la cabeza. — Lo siento, Atsushi-kun, no podré.

— ¿Por qué no?

Chuuya señaló a Tachihara con un gesto de la cabeza. — Estoy ayudando al idiota ese.

Chuuya se giró y se fue con Tachihara.

Fyodor, se acercó a Atsushi. — ¿También quieres la tablet?

Atsushi asintió, apenado. — Sí, la mía se estropeó y realmente necesito una nueva.

Fyodor asintió pensativo, y sus ojos se dirigieron hacia Dazai, quien se estaba levantando del césped. — ¿Por qué no le pides ayuda a Dazai?

— Dazai-san, ¿Podrías ayudarme en la competencia? Si ganamos, le daré las entradas al acuario.

Dazai lo miró durante un rato, evaluando la situación. Finalmente, suspiró y sonrió ligeramente. — No puedo negarme a ti, Atsushi-kun.

— Gracias, Dazai-san.

Al llegar al patio de la escuela, Atsushi le dijo a Dazai que iria a  inscribirlos para la competencia.

Dazai asintió, observando cómo Atsushi se alejaba hacia la mesa de inscripciones. Se quedó al lado de Fyodor, quien parecía interesado en ver cómo se desarrollaría la competencia.

— ¿Qué hacen aquí? — dijo Chuuya sorprendido de ver a Dazai ahí.

Fyodor respondió antes de que Dazai pudiera hablar. — Dazai también participará en la competencia junto a Atsushi.