Capítulo 28

162 15 0
                                    

Neela:

El chico me persigue a todos lados, di que para saber cómo caerle mejor a su jefe, no para de revolotear a mi alrededor y me marea, hasta que consigo escabullirme y cunado estoy llegando a las puertas del despacho de Eros veo el rostro de mi padre al serrarse las puertas del asesor, pero, ¿qué hará el aquí?

-Tardaste mucho-me dice el hombre que amo con una sonrisa en los labios.

-Lo siento me distraje un poco ¿Algo importante? -apunto la laptop, pero dejando claro que me refiero a todo.

-No, solo que mis vendedores deben de estar creyendo que soy un poquito lerdo-porque no me dice que él estuvo aquí, que esconde que no me lo puede contar, le daré un poco de tiempo por ahora, rodeo el escritorio tomando su rostro.

-Nadie pensaría que eres lerdo-me lleva a su regazo-ahora si mi lerdo precioso, termina de una vez-digo tratando de salir de su agarre, pero niega.

-Quédate conmigo, así trabajare más rápido, no hay mejor incentivo que tu-lo dice en serio porque su polla dura me rosa el trasero.

Me quedo ahí en su regazo, con mi cabeza en su pecho mientras redacta informes, hace llamadas y firma documentos hasta que al fin termina, no ha dejado que me le despegara ni un instante.

-Podernos irnos, todo está hecho, muero de hambre-suspiro.

-No puedo seguir quedándome contigo Eros.

- ¿Por qué? -pregunta rápido-eres mi novia.

-Es que...-me interrumpe.

-Deja de pensar por unos minutos, cenemos, veamos una peli y si deseas irte o quedarte lo decides tú. Eso sí, debo decirte que si te quedas soy el plato estrella -se me hace imposible no reír y el me acompaña.

Llegamos rápido al penthouse y me sorprende lo que me encuentro, no queda rastro de la decoración original, todo está cubierto de velas, muchas, de diferentes tamaños, iluminando la estancia junto a la gran luz de luna que entra por el ventanal, donde se encuentra una preciosa cama, un poco más alejado una mesa con comida, vino y, para terminar, en la pared un proyector para transmitirnos la película que aún no sé cuál será.

- ¿Te gusta lucecita? -me quedo sin palabras.

-Es, es precioso-toma mi mano guiándome por el pequeño camino, cargándome y dejándome sobre la cama. Veo la llamarada de velas dándome cuenta que son del mismo rojo de las sábanas, simplemente es hermoso.

- ¿Por esto tardabas tanto?

-Mmmmm- gruñe sobre mi cuello-quería sorprendente, pero prometo que la próxima vez lo hare con mis propias manos, todo y cada uno de los detalles.

- El simple hecho de querer sorprenderme es todo lo que necesito, te amo mi lerdo.

-Oye -me regaña divertido.

-Prefieres que te llame señor-respira fuerte y su mano va a mi garganta, joder porque eso me gusta tanto.

-Neela eso me excita y debemos cenar-trago fuerte mordiendo mi labio, me toma nuevamente en brazos hasta la mesa.

Después de cenar nos tumbamos sobre la cama y Jurassic Park 5 se reproduce está concentrado, de vez en cuando toma traguitos de su copa de vino, está en bóxer, joder esta para comérselo a bocado. Como esta tan ensimismado tomo uno de los hielos de la cubitera, un jadeo se le escapa cuando lo paso por sus abdominales.

-Neela-no lo dejo continuar, porque deslizo mis manos por su torso, llevando el hielo por todas partes.

- ¿Está frio? - me burlo y el en un rápido movimiento se pon encima de mí.

Eros Donde viven las historias. Descúbrelo ahora