Me dirigieron al ring del calabozo del castillo, a una escena sombría y opresiva, impregnada de un aire denso y húmedo que parecía filtrarse desde las paredes de piedra centenaria. En el centro, un cuadrilátero improvisado con tablones de madera gastados y cubiertos de polvo se alzaba sobre el suelo de tierra compactada. La iluminación era tenue y provenía de antorchas dispuestas estratégicamente en las paredes, arrojando sombras ominosas que se movían con cada parpadeo de la llama.
Alrededor del ring, los muros de piedra estaban cubiertos de musgo y desconchones, testigos mudos de incontables enfrentamientos pasados estaba envuelto en un clamor ensordecedor. En un rincón ya estaba esperándome una especie de boxeador de casi dos metros de altura y musculoso, se preparaba mentalmente para enfrentarme. Puede ser más alto, quizás más rápido, pero no me en lo absoluto, y no pienso dejar que nadie me detenga.
Se acerca Tomasso al ring para hacer su declaración.
–Yo invite a Sideras para ser miembro de esta La Gran Famiglia–dijo Tomasso a los miembros–Pero hoy en su juramento de iniciación probará–me observa de manera descarada– porque no me equivoque al elegirlo.
Este ring es mi oportunidad de mostrar de qué estoy hecho, mientras subo la mangas de mi camisa para estar más cómodo y demostrar que soy digno de La Famiglia, se acerca Don Giovanni para dar por iniciada la pelea.
–¡Vamos, tráeme lo mejor que tengas!
–¡Te voy a destrozar, maldito! – dice con un acento italiano, lanzando una combinación rápida de golpes, pero contraataco con un uppercut.
La pelea continuaba por unos minutos, con mi oponente lanzando ataques poderosos mientras me defendiendo después de una serie intensa de intercambios este sujeto ¡es bueno! no se dé donde lo sacaron, he llegado a entrenar con Tomasso que es un demente en el ring y casi siempre llegamos a un empate, pero este sujeto no le queda corto en lo absoluto me ha dado algunos ganchos que me está constando respirar debo acabar con esto pronto. Finalmente logró conectar un gancho devastador que derribó a mí oponente, lo he derrotado. Alguno espectadores estallan en vítores, parece que de esta manera se entretienen en los miembros de la Mafia creí que estos rituales solo eran propios de La Bravta, mientras mi oponente se tambalea y cae al suelo, incapaz de continuar.
De igual forma me tambaleo hacia el centro del ring, exhausto pero triunfador fueron ocho minutos muy agotadores.
–¿Quién más? – mirando a los líderes en los exteriores, respirando agitadamente. –aquí estoy.
Mientras sostengo la mirada llena de determinación, de la nada aparecieron tres jovencitos en el ring quizás eran estudiantes de secundaria pues tenían contextura menuda, con acné en sus rostros y altos, todo fue muy rápido. Uno de ellos sostenía un cuchillo reluciente, mientras los otros dos cerraban el paso de escape. Pero mi entrenamiento en Krav Maga me mantenía en alerta y preparado sin mostrar signos de pánico, evaluó rápidamente la situación se lanzó hacia mí con un movimiento rápido y agresivo con su cuchillo, esquivo el primer intento de ataque desviando el cuchillo hacia un lado con un movimiento preciso de su brazo. En un abrir y cerrar de ojos, giró sobre sí mismo y atrapó la muñeca del muchacho con una mano, torciéndola con firmeza hasta hacer que el cuchillo cayera al suelo y lo noqueo rápido.
Como reacción domino, los otros dos atacaron, ya en guardia lanzó una serie rápida de golpes incapacitando a uno de ellos con un golpe en el estómago y asestando un rodillazo al segundo en la entrepierna. Con los tres ahora en el suelo y retorciéndose de dolor.
Me dirijo a los lideres quienes están analizando todo felices y satisfechos, mostrando que aún estoy de pie, elevo mis brazos en señal de que puedo continuar. Tomasso me observa parece que quiere reírse, pero hace el esfuerzo inhumano en no hacerlo.
–Aún no ha acabado esto... –mientras se acerca al ring y ve los cuatro sujetos tirados –aún respiran... no has acabado con ellos–Se acerca a mí, me da un arma y una daga.
–Siempre serás juzgado en vida y sentenciado por tus propios demonios por la sangre que derrames en adelante ...nunca lo olvides Atlas.
–No lo olvidaré Don. – mientras tiro del gatillo y acabo con la vida de estos hombres.
–Vaya... que sorpresa, no dudaste–me quita el arma y procede a poner su mano en mi hombro–Bienvenido a La Gran Famiglia ganaste tu lugar después de todo.
Hay comprendí los tipos eran traidores de La famiglia , acabo de asesinar en frente de toda la organización, así eliminan a los traidores, el simbolismo y la lección es que si entre vivo aquí , saldré solo muerto.
Todos se ponen de pie, vamos a una especie de capilla y con la daga que me dio el Don me indica que debo herirme, para derramar mi sangre en la fuente de agua cristalina que tienen ahí y explicándome que dicha agua alimenta las jardineras del castillo.
Ajeno al simbolismo que representa dicho ritual, observo que mi sangre se funde con el agua impoluta de la fuente que pronto alimentara toda la vegetación del La Gran Fortaleza.
–Ahora si eres mi hermano. –se acerca Tomasso y me abraza. –Ven se que estas de pie, solo por la fuerza de voluntad.
–Gracias. –le susurro.
Se quedan brindando algunos lideres, mientras que otros van de regreso al calabozo.
–Lo hiciste bien, sabía que podrías.
–¿Seguro?
–Bueno...dude un poco, ese animal siempre fue bueno. Fue mi maestro después de todo, le decían La Manopla.
–Y porque mate a "La manopla de la Cosa Nostra"
–Traidor, no fue evidente. El Don es medio teatral a la hora de hacer sus cosas de iniciación.
–Si me di cuenta.
Hemos llegado a una especie de habitación lujosa y moderna, para estar en el interior de un castillo antiguo, me siento inmediatamente en el sofá necesito un respiro.
–Creo que te rompió algunas costillas.
–Lo hizo.
–¿Solo dirás eso?
–¿Tienes hielo?– mientras me saco la camisa.
–Te acaban de moler a golpes y pareces una piedra sin emociones.
–No voy a ponerme a llorar, en una sala llena de los más grande lideres criminales de la ciudad.
–De la que eres miembro ahora no lo olvides.
–No lo olvido.
–Toma–me extiende una bolsa de hielo para ponerme en los golpes–te ayudara algo.
Me dice que tome una ducha pronto para que regresemos, ya que hay nuevos miembros al igual que yo, están en su prueba de iniciación. Yo solo quiero saber cómo está mi Abril, si ya despertó.
–Te esperaría, pero no puedo perderme la siguiente prueba, es una chica.
–¿Una mujer?
–Si, dicen que es muy buena con las espadas.
–Y porque es que a mi me...
–Eres el nerd de los computadores.
–¡Hijo de perra!
–Me corrijo, el Mejor Nerd de los computadores del mundo.
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Por siempre invierno
RomanceSolo soy una chica más de la que dicen que "la suerte" le cambio la vida, pero no fue ella si no ... el destino irrevocable que me atrapó en su caótica vida. ...