𝕽𝖊𝖕𝖚𝖙𝖆𝖙𝖎𝖔𝖓 (Pedro Pascal) [PAUSADA]

26. MONTAR

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Tal vez el día se encontraba caliente o solo me encontraba al borde de la muerte.
El calor me parecía insoportable, tanto que la ropa comenzaba a estorbarme, o simplemente exageraba.

Me encontraba junto a Ellie, terminando de acomodar el alimento de los animales, cuando escuchamos el relinchar de los caballos.

Ambas salimos del lugar solo para corroborar que Joel se encontraba en Jackson. No pude evitar mirar cada movimiento, en especial a este cabalgar a uno de los caballos. Su cabello se había revuelto con el viento y parecía encontrarse agitado y levemente sudoroso.

— ¿Estás bien? — preguntó Ellie mientras Joel y Tommy se acercaban — te escuché jadear — la preocupación en su rostro hizo que asintiera completamente, desviando mi atención en ella. Sin olvidar la sonrisa en mi rostro.

Aunque la castaña parecía no muy convencida, simplemente asintió.
Tan solo teníamos once años de diferencia y podía decir que nuestra relación era excelente, con todos en particular, sin embargo, con Joel, cada que me miraba fijamente, sentía cuán inestables eran mis piernas.

— Hola, niña — saludó con una sonrisa antes de abrazar a Ellie con entusiasmo, sin siquiera poder evitar alejarme de ellos.

Ellie simplemente lo abrazó, mientras yo, solo pude sentir mi pecho estrujarse, mirándolo hacia arriba debido a su altura. Aunque este se encontrara a centímetros de distancia, era como si aquella distancia no existiera e incluso me robara el último aliento.

— Hola — saludó cortamente mientras saludaba con la cabeza. Apreté los puños ante ello y no pude evitar mirar, de su cuello, resbalar una ligera gota de sudor.

Inmediatamente tragué en seco antes de tartamudear un torpe "hola".

— Creo que está enferma, Joel — intervino Ellie, ante el incómodo momento — desde la mañana está extraña.

Miré a Ellie mientras levantaba las cejas.

— ¿Ah, sí? — preguntó Joel con interés — Creo que será mejor que vayas a casa, Ellie, la llevaré con la enfermera.

La castaña nos miró por un corto tiempo antes de asentir.

— Mejórate pronto — expresó, despidiéndose con la mano.

Ambos la miramos alejarse, antes de notar la mirada de Joel en mí. No pude evitar sentirme pequeña ante su presencia.
Y, con un suave movimiento, Joel me incitó a caminar en sentido contrario a Ellie.

El camino fue una tortura, en especial cuando este no expresó ninguna palabra, ni yo tomé la iniciativa para hacerlo.
Ambos entramos al lugar, este cerrando la puerta consigo.

— ¡Lauren! — llamó a la enfermera, sin embargo, no obtuvimos respuesta — ¿Así que te sientes mal? — preguntó luego de dar un vistazo alrededor — Menos mal que estoy aquí — expresó antes de devorar mis labios con ansia.

Ambos chocamos contra la pared, haciendo un pequeño ruido, que se vio interrumpido ante un sutil gemido de mi parte.
No podía negar que sentir sus brazos hacía que aquel calor aumentara, sus labios devorando mi piel y labios se volvía mi peor martirio, en especial cuando sus manos descendían por mi cuerpo y tan pronto encontraba un camino libre mi piel ardía.

En un ágil movimiento, Joel me mantuvo en sus brazos solo para llevarme al escritorio de la enfermera. Aunque luego me arrepentiría, no podía negar que aquello se sentía tan bien.

Las manos de Joel masajearon suavemente mis senos, mientras cuidadosamente desabotonaba mi camisa.
Tan pronto, sus dedos fríos tocaron mi piel, haciéndome jadear. Podía sentir la textura de sus dedos, llevándome al borde del abismo al juguetear contra el tirante de mi sostén. Y en un abrir y cerrar de ojos, me tenía semi desnuda.