no te dejare ir

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De vuelta a Anahí..

Estoy haciendo la maleta a toda prisa. Golpeando todo lo que estaba frente a mí, sin mirar nada. Poncho abre la puerta y me asusto.

Anahí: ¡Qué susto! –Digo sonriendo

Se acerca y me abraza por detrás.

Anahí: ¡¡ Ay! ¡Te he echado mucho de menos! Me besa el cuello

Poncho: Yo también. Cada día era la añoranza por ti lo que me hacía despertar y luchar para terminarlo pronto.

Anahí: ¿¿Qué pasó? ¿Cómo lo conseguiste? – Poncho se ríe – ¡Cuéntame!

Poncho: Una larga, larga, larga historia. ¡Te lo cuento todo! Vas a estar muy orgulloso de tus amigos, de mí tal vez", una sonrisa, "y de tus fans.

Anahí: ¿Mis fans? Sacude la cabeza en sentido negativo

Poncho: No tienes idea de lo que hicieron.

Anahí: OH DIOS MÍO – Empiezo a reírme – tengo miedo. ¿Debo tener miedo?

Poncho: ¡Tienes los mejores fans del mundo!

Anahí: ¡Quiero saberlo ahora! ¡¡Dime!!

Poncho: Digamos que trabajamos en equipo. ¡Y un buen equipo! – me abraza, besándome la frente – Prepara tu maleta de inmediato. Salgamos de aquí.

Anahí: ¿Nos vamos a Madrid?

Poncho: Mañana por la mañana. Vayamos ahora a un hotel en el centro de la ciudad.

Poncho me ayuda a terminar de empacar. Cuando lo cierra y me cambio rápidamente de ropa. Me ato el pelo en un moño alto y agarro el bolso.

Anahí: ¿Vamos? – Ojo sonriente

Poncho: Claro. "Yo me llevo una maleta y él dos.

Cierro la puerta y bajamos las escaleras, charlando sonriendo. Ariela está en la sala con Pablo, viendo la televisión. Me acerco.

Anahí: Llegaremos a ello.

Ariela: Sí, querido. ¡Sé feliz!

Anahí: ¡Gracias por todo! Ambos. Por el cuidado, cariño y, ah.. Pablo, no olvidaré tus enseñanzas con flores. Me gustó mucho.

Pablo: De nada.

Los abrazo uno a uno y Poncho también los saluda agradeciéndoles. Y salimos de la casa. Miro hacia atrás y veo a Ariela y Pablo en la puerta, saludando. Le devuelvo el saludo y sigo adelante. En la vida no debemos mirar tanto hacia atrás, siempre debemos levantar la cabeza y vivir lo que tenemos delante. Solo nuestro presente. Podría vivir en el pasado para siempre. Reflexionando sobre todas las oportunidades que tuve para quedarme con Poncho y las desperdicié. Todas las oportunidades que nos ha dado la vida, todos los reencuentros. Pero no... Decidí mirar hacia adelante. Ahora que Velasco es parte de mi pasado, podría pensar en todo el dolor, todo el sufrimiento, todo el dolor, toda la angustia, todo lo que me hizo pasar. Pero no. Sigo adelante. Porque sé que lo que me espera es mucho mejor que cualquier cosa que haya experimentado. Es mejor porque ahora estoy con el amor de mi vida. Estoy seguro de las cosas que quiero. Ya no soy una niña, una joven que tiene miedo y está llena de sueños. Hoy soy una mujer, madura, segura, con alma de niña. Sé cada paso que tengo que dar, sé a quién quiero a mi lado, sé que la vida es mucho más de lo que pensaba. Hoy veo el mundo más allá de mi ombligo y veo que hay que sufrir, romperse la cara, rechinar el corazón mil veces para valorar lo importante, lo que siempre ha estado presente. Familia, amor, amigos, fans. Cada vez este sentimiento se hace más fuerte y más verdadero.