TN
Las cosas pintaban bien, un equipo había intentado contratarlo, aunque lo mandaron a jugar en otro para conseguir experiencia y poder debutar como se debía.
Algunas veces, mi mamá y yo íbamos a ver los partidos, ya sea porque ahorrábamos o porque él nos enviaba boletos.
Recuerdo que, la primera vez que fui a un partido suyo, me encontraba muy emocionada, algo en mí decía que Marcelo sería titular y metería muchos goles, la realidad fue que ni siquiera lo sacaron a la cancha.
-Cariño, ¿dónde está Marcelo?- preguntaba mi mamá algo confundida.
-No lo veo, creo que está en la banca- dije haciendo los ojos chiquitos, intentando encontrarlo con la mirada.
Una vez terminado el partido, me separé de mi mamá para encontrar a Marcelo. Lo encontré afuera del estadio, sentado sobre la banqueta.
-Hola, güerito- dije mientras me sentaba a su lado.
Me saludó con poca energía.
-¿Estás bien?
Él negó algo triste.
-No te preocupes, para el próximo partido te van a meter, a lo mejor están probando a los otros jugadores- dije intentando convencerlo.
-Ya van cuatro partidos en los que no juego, no creo que me metan a los siguientes- respondió sin mirarme.
-Es algo temporal, ya verás cómo sí te van a meter- dije sonriendo.
-Lamento que tu mamá y tú hayan venido hasta acá para esto- dijo bastante arrepentido.
-No te disculpes, nos sirvió para salir un poco de la casa.
Estuvimos hablando un rato, al parecer, Marcelo comenzó a alegrarse un poco.
-¿Ya estás lista para la universidad?- preguntó con una sonrisa.
-Sí, voy a estudiar gastronomía- respondí emocionada.
-Cocinas muy bien, no te será difícil- dijo alentándome.
-Ojalá, estoy nerviosa.
-Ya me tienes a mí para probar cada platillo que hagas.
-Espero no intoxicarte- bromeé.
-Cocinas bien, moriré de indigestión, pero no por estar intoxicado.
Estuvimos ahí un rato más, después fuimos a comer y me acompañó al hotel donde nos estábamos quedando.
-Mañana nos vamos, así que me voy despidiendo- dije algo triste.
Nos abrazamos y ya estaba por entrar en el edificio cuando escucho que me llama.
-Espera, te compré algo- dijo Marcelo, por lo que volteé.
Extendió su brazo, sosteniendo una cajita negra. La abrí con curiosidad, encontrándome con un collar dorado que tenía un dije con nuestras iniciales.
-Para que no te olvides de mí mientras estés allá y yo acá- dijo riendo.
-No podría hacerlo, pero gracias, está muy bonito- dije con una gran sonrisa.
Lo abracé otra vez y después me fui.
Pasó el tiempo, regresé a mi casa y miré algunos partidos del equipo de Marcelo por televisión. Rara vez lo metían y, cuando lo hacían, no tenía tanto contacto con el balón, parecía un jugador totalmente diferente al que yo conocía, pero no era culpa suya, era un poco de inseguridad mezclada con el poco reconocimiento que le ofrecía su equipo.
-Después de esto no me van a querer en ningún equipo, tal vez intentarlo fue un error- decía sollozando algunas veces.
-No es tu culpa, eres un gran futbolista, sólo es una mala racha, ya pasará- decía intentando animarlo.
La distancia no ayudaba, hacía que mis palabras sonaran vacías, pero, aún así, él seguía adelante.
Finalmente, después de un largo periodo de frustración y poco tiempo en la cancha, un equipo pidió comprarlo: el club Tigres.
![](https://img.wattpad.com/cover/373624827-288-k780652.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Best Friend - Marcelo Flores
FanfictionEllos dos son mejores amigos desde niños. Su amistad se convierte en una a distancia desde que él debutó como futbolista, pero, aún así, ella asiste a sus partidos cada que puede e incluso se transfiere de universidad una vez que el chico es contrat...