TN
-¿Entonces quién es? -me preguntó confundido.
-No sé, Chelo, mejor ahorita revisas tú -respondí seria, aunque intenté no sonar así.
Marcelo terminó de hacer el desayuno: waffles y un huevo. Me llevó un plato con eso y luego regresó a la cocina para preparar café. Nos sentamos a mirar la tele un rato.
-¿No vas a revisar quién te mandó mensaje? -le pregunté sin despegar la mirada de la televisión.
-Ah sí, ahorita.
¿Por qué tanto suspenso? ¿No lo quería abrir frente a mí?
Estaba algo nerviosa, al parecer Marcelo lo notó.
-¿Qué tienes, linda?
-Nada, corazón. Es que ando cansada.
-¿No pudiste dormir? Lo siento, debí dejarte en mi habitación y yo dormir en la sala.
-Nooo, dormí bien -le dije con mis mejillas poquito rositas.
Estuvimos un rato platicando, lo cual me tranquilizó un poco, aunque aún estaba preocupada por la persona del mensaje.
-Te quedó muy bien el desayuno, güerito -le dije sonriendo.
-Gracias, linda. Quemé los primeros tres waffles y el primer huevo, pero valió la pena -dijo riendo.
-Lo hiciste muy bien.
Me acerqué a besarlo. Él respondió poniendo sus manos entre mi cuello y mis mejillas, dándole más profundidad al beso.
Estuvimos un rato más viendo la tele, hasta que fui al baño. Regresé y él estaba mirando su celular. Me senté a su lado, quería confiar en él, darle su privacidad, pero mi vista periférica me hizo notar que estaba dentro del perfil de instagram de una chica bastante bonita: tenía un cuerpo muy bonito y se arreglaba mucho, era medio buchona.
Comencé a mover las piernas algo impaciente, ya no quería estar ahí.
MARCELO FLORES
Una chica llevaba las últimas dos semanas enviándome mensajes, pero no sabía quién era, tampoco me interesaba mucho. Pero me llamó la atención que mencionó algo de un bar, entonces me metí a su perfil para ver si la reconocía. Después de hacer memoria un rato, recordé que había sido la muchacha que se acercó a hablarme el día que Tn se fue a Ciudad de México. Me dijo que me admiraba y poco más, se sentó junto a mí para platicar, pero mejor me fui con mis compañeros. Si sigue así de insistente, la voy a bloquear.
Ya que descubrí de dónde conocía a la chica, me metí al chat de Tigres. Al parecer tendríamos entrenamiento hoy.
-Me la estoy pasando muy bien contigo, güerita, pero tengo entrenamiento en media hora -le dije, aún mirando el celular para asegurarme de no estar equivocado.
-Ah, sí, claro... Igual ya me iba -dijo en voz baja, mientras se levantaba y se dirigía a la puerta.
-Espera, linda -le pedí, tomando su mano.
Ella se volteó hacia mí, aunque con la mirada en el suelo. Yo puse mi mano en su mentón para llamar su atención. Sus hermosos ojos se quedaron clavados en mí durante varios segundos.
-Oye, Chelo -comenzó con la voz un poco temblorosa- Si un día te dejo de gustar y te gusta otra, ¿me lo puedes decir? Siempre has sido mi mejor amigo, no quiero que terminemos mal.
Sus palabras me confundieron bastante.
-¿De qué hablas? ¡Por supuesto que no terminaremos mal! Además, es imposible que me guste alguien que no seas tú, hermosa.
-Pero si pasara, ¿prometes que me dirías antes de irte con ella?
Tn se veía tan triste, que me hacía sentir terrible. Sentía como si de verdad la hubiera engañado.
-Lo haría, pero no puedo prometerte algo que jamás pasará. Sólo tengo ojos para ti, preciosa, siempre ha sido así, ¿por qué cambiaría eso ahora? Ahora que estoy más enamorado que nunca de tu forma de ser, lo bien que cocinas, tus brillantes ojos, esos labios tan perfectos, lo hermosa que estás... Tendría que ser demasiado tonto como para cambiarte o dejarte ir, güerita
Tn me abrazó. Fue un abrazo tan cálido, sentí como mil mariposas volaban inquietamente por mi estómago.
-En serio te amo, Chelo.
-Yo más -hice una breve pausa- ¿Ya me vas a decir por qué te pusiste así de repente?
-Lo siento mucho, es que hace rato miré que una chica te estaba invitando a salir, creí que ibas a ir con ella -me explicó algo avergonzada.
-Ahhh, no es lo que parece, hermosa. Mientras estabas en Ciudad de México, fui con los del equipo a un bar y esa chica se acercó a decirme que me admiraba, después empezó a enviarme mensajes, pero no le respondí -saqué mi celular y le mostré el chat.
-¡Noooo, no tienes que mostrarme nada! Confío en ti... Lamento haber leído los mensajes.
-No me molesta que los hayas leído. No hay ningún problema con que mires mi teléfono; no tengo nada que ocultar, solamente lo utilizo para hablar contigo, mi familia y los del equipo.
Ella se puso roja. No necesitaba leer su mente para darme cuenta de que se sentía avergonzada por haberse preocupado de la chica.
-¿Quieres venir a ver el entrenamiento? -le pregunté sonriendo.
-Nooo, gracias. Debo darte tu espacio, además, me voy a sentir muy posesiva estando ahí.
-No te preocupes. También van la novia de Sebas, los hijos de Gignac y algunos otros.
Logré convencerla. Llegamos tarde, me regañaron por eso, pero no importaba mucho.
TN
Estuve ahí mirando cómo entrenaban. Marcelo tenía razón, no era la única ahí, la novia de Sebastián se puso a hacerme plática, es una chica muy amable y muy guapa.
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Best Friend - Marcelo Flores
FanfictionEllos dos son mejores amigos desde niños. Su amistad se convierte en una a distancia desde que él debutó como futbolista, pero, aún así, ella asiste a sus partidos cada que puede e incluso se transfiere de universidad una vez que el chico es contrat...