Parte 9: te extrañé

320 16 0
                                    

TN

Estaba algo nerviosa. Hace casi un año que no veía a Marcelo, a lo mejor ni me reconocía... Si eso pasaba, me dolería muchísimo, aunque sería de esperarse.

Todos los aficionados se fueron, pero seguía sin mirar a los jugadores. Un rato más tarde, contemplé a un grupito de chicos caminaban entre charlas hacia sus respectivos carros, la mayoría deportivos. En eso, noté que ahí estaba Marcelo, mirándome. Unos segundos después comenzó a correr hacia mí con una sonrisa. No tardó en llegar a dónde me encontraba. No habló, solamente me abrazó, cargándome en el aire unos segundos. Una vez que me dejó en el suelo, dejó un beso en mi mejilla y me soltó.

-Diu, no me embarres tus babas- dije dando un paso para atrás de broma.

Marcelo sonrió y puso sus manos en mi cuello, después se acercó a dejar varios besos en mi mejilla y mi frente. Por alguna razón, el suave tacto de sus manos y sus labios me causó un escalofrío... ¿Por qué? No era la primera vez que hacía algo parecido.

-¿Cuándo llegaste?- preguntó alegre ya que me había soltado.

-Hoy, hace un rato.

-Me hubieras dicho que pasara por ti.

-No, no era necesario... Además, recordé que tenías partido, no quería interrumpir.

-No interrumpes, lo habría hecho encantado.

SEBASTIÁN CÓRDOVA

Ya nos íbamos todos cuando el loquito de Marcelo se fue corriendo. Fue con una chica y la abrazó. Era la primera vez que la veía, ¿sería esa la chica que le gusta?

-¿Qué pedo con Marcelo?- preguntó Ozziel al verlo alejarse.

-¿Apoco esa es su novia?- preguntó Láinez, quien iba a mi lado.

-No- respondí inconscientemente.

-Si no es su novia, que me la presente- dijo Brunetta.

-¿Flores sí va a venir o no?- preguntó Pizarro.

MARCELO FLORES 

Estaba tan emocionado, que olvidé que los demás me estaban esperando.

-Marcelo, ¿vas a ir?- me gritó Gignac desde lejos.

Miré que ella se ponía roja.

-Ay, lo siento... Debí suponer que tenías planes, mejor nos vemos luego- dijo y rápidamente se volteó y dio unos pasos, aunque la tomé de la muñeca para que no se fuera.

-Espera poquito- respondí mirando a mis compañeros, los cuales se habían acercado un poco.

Me acerqué un poco más a ellos, Tn se quedó parada mirándome.

-Perdonen, voy con ustedes para la otra- dije y sonreí.

-¡Noooo, ve con ellos!... Sólo quería saludarte, debo irme, ni siquiera he terminado de desempacar- dijo en voz baja con una sonrisa nerviosa, podía darme cuenta de que mentía.

-¿Y por qué no vienen los dos?- intervino Láinez con una sonrisa.

-Sí, al fin y al cabo, también van a ir las novias de algunos- dijo Aquino, apoyando la idea.

Los demás no tenían problema con eso y yo la volteé a ver, esperando a que accediera, pero parecía sentir bastante pena como para responder.

-Ándale, vamos- dije sonriendo.

Tn terminó aceptando, más que nada porque le dio vergüenza decir que no. Ella y yo nos fuimos juntos, los demás se fueron en sus carros propios o de raite con sus amigos.

-¿Y si mejor me dejas en mi casa? Como que me está doliendo la panza- mintió mientras jugaba nerviosamente con sus manos.

-Te duele de la emoción de que vas a conocer a Láinez- bromeé.

-No quiero ir- dijo haciendo un puchero. -Me da pena, son tus compañeros.

-Yo te decía que nos fuéramos, pero tú dijiste que venías- dije sonriendo.

-Ándale, Chelito- me abrazó por los hombros e hizo un puchero. -Llévame a mi casa.

-Entonces vamos los dos a algún lado... para celebrar que viniste.

-No puedo dejarte hacer eso, sería egoísta pedirte que no estés con tus amigos para que pases tiempo conmigo.

-No me lo estás pidiendo, yo lo hago porque quiero estar contigo.

Tn me soltó y se quedó muy seria, parecía arrepentida. Orillé el carro, quería hacer algo para animarla.

-Espérame, ahorita vengo- dije y me bajé.

TN

Marcelo regresó algunos minutos después con dos frappés. 

-¿Quieres de mazapán o de oreo?- preguntó mientras leía lo que escribieron con Sharpies en los cafés.

Cada quien eligió uno. Intenté pagarle a Marcelo, pero se negó.

-Entonces, ¿a dónde vamos?- me preguntó antes de darle un sorbo a su café.

-Con tus amigos.

-¿Segura?

-Sí.

Estaba nerviosa, pero realmente no me interesaba adónde íbamos, sino que por fin podía ver a mi mejor amigo.

-Te extrañe mucho, güerito- dije sonriéndole.

-Yo más, güerita. 

Best Friend - Marcelo FloresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora