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Haru, sintiendo una mezcla de emoción y deseo, comenzó a dejar suaves besos en el cuello de Hyunjin. Cada beso provocaba suspiros de placer en él, quien instintivamente llevó sus manos a la espalda de Haru, disfrutando del contacto. Ella, con una sonrisa juguetona, continuó bajando, levantando lentamente la camiseta de Hyunjin desde los bordes.

—¿Haru? —Llamó Hyunjin con un tono serio, sus ojos aún cerrados.

—¿Sí? —Respondió ella, susurrando mientras besaba su mandíbula y dejaba un beso fugaz en sus labios.

—Dijimos que solo dormiríamos —Recordó Hyunjin, su voz manteniendo un tono severo pero cariñoso mientras acariciaba la espalda de Haru con suavidad.

—Lo sé —Dijo Haru con un tono suplicante, colocándose encima de él —Pero tenerte aquí conmigo se siente tan bien. Quiero estar contigo.

—Estás conmigo —Dijo Hyunjin, abriendo los ojos para mirarla con dulzura —Pero si quieres estar conmigo de esa manera, no podemos. Dijimos que solo íbamos a dormir; además, no voy a tener sexo contigo en tu casa.

Haru sonrió, y para molestarlo, le dio un suave pellizco en las mejillas. Hyunjin, con una leve sonrisa, disfrutó del gesto juguetón. Haru se quitó su blusa de seda sin mangas y se inclinó para darle un beso pequeño. Hyunjin abrió los ojos y no pudo evitar reír ante el comportamiento caprichoso de Haru, quien se había desnudado parcialmente frente a él.

—Genuinamente estoy cansado —Murmuró Hyunjin, abriendo los ojos y observando a Haru sin su blusa, soltando una pequeña carcajada —Haru, Haru, Haru...

La tomó por la cintura y, con un movimiento suave, la colocó debajo de él. Besó sus labios con ternura antes de moverse hacia su cuello, dejando una serie de besos húmedos y profundos que resonaban por toda la habitación junto con los suspiros de Haru.

—No me marques —Suspiró Haru con un tono juguetón, provocando otra risa en Hyunjin.

—¿Por qué no? —Preguntó él, deteniéndose para mirarla a los ojos.

—La última vez, mis padres pensaron que había sido por mosquitos —Confesó Haru, riéndose de la situación, lo que hizo que Hyunjin también se riera —No les aclaré nada y solo dejaron repelente.

Hyunjin negó con la cabeza, sonriendo mientras continuaba besando a Haru con más intensidad. Sus labios se deslizaron hacia sus pechos, dejando un rastro de besos que aumentaban en agresividad, lamiendo la zona lista para marcarla ligeramente. Haru se dejó llevar, sabiendo que podía cubrir cualquier marca con una blusa sin escote. Hyunjin volvió a besarla, mordiendo suavemente su labio inferior, provocándole un jadeo cuando su mano comenzó a deslizarse dentro de sus shorts.

Se movió hacia su oreja, mordiendo el lóbulo antes de susurrar palabras provocativas.

—Quiero hacerte tantas cosas —Susurró, notando cómo la piel de Haru se erizaba bajo su tacto —Lo que hicimos en el lago y en mi habitación es solo el comienzo de lo que quiero hacer contigo.

La intensidad de sus palabras, cargadas de pasión y deseo, hizo que Haru lamiera sus labios, sumida en las sensaciones que Hyunjin provocaba en ella. Sin embargo, su momento fue interrumpido por el repentino sonido de golpes en la puerta de Haru, seguido de la voz preocupada de su madre.

—Carajo —Murmuró Haru, separándose rápidamente de Hyunjin y buscando desesperadamente un lugar para esconderlo. Optó por el armario, donde Hyunjin se ocultó apresuradamente. Haru se puso la blusa de inmediato, fingiendo estar medio dormida cuando abrió la puerta.

—¿Por qué me despiertas tan tarde? —Se quejó Haru, intentando sonar molesta y manteniendo la puerta semiabierta para evitar que su madre viera a Hyunjin.

HONEY┃HYUNJIN.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora