𝐄𝐥 𝐕𝐢𝐫𝐮𝐬 𝐃𝐞𝐥 𝐎𝐝𝐢𝐨 •𝗠𝗶𝗖𝗵𝗮𝗲𝗻𝗴•

𝟐𝟖

𝑷𝒐𝒗:𝑵𝒂𝒓𝒓𝒂𝒅𝒐𝒓

Chaeyoung se apoyó contra la pared fría de uno de los corredores del refugio, con la mirada perdida en algún punto del suelo. En su mente, las imágenes de Mina abrazando a Nayeon se repetían como un ciclo interminable, cada vez más doloroso. Había algo tan desconcertante y doloroso en todo aquello, algo que no terminaba de encajar en su comprensión de lo que había pasado entre ellas. Sabía que había sido un error ilusionarse tan rápido, confiar tan ciegamente en esos momentos íntimos que había compartido con Mina.

La idea de que Mina solo había jugado con ella, que quizá solo había querido aprovecharse de su inexperiencia, la llenaba de un amargo resentimiento. Era una posibilidad que no podía ignorar, por más que quisiera. Se sentía usada, como si lo único que hubiera importado fuese su virginidad, y ahora que Mina la tenía, podía seguir adelante sin ninguna atadura. La idea de ser una simple conquista, un entretenimiento pasajero, la lastimaba profundamente. Pero, a pesar del dolor que la invadía, no podía llorar. Las lágrimas no venían, solo una confusión sorda que la envolvía por completo.

En medio de ese caos emocional, Sunoo apareció. Siempre perceptivo, notó de inmediato que algo estaba mal.

Sun:Chae.. ¿Qué te pasa?

Le preguntó suavemente, acercándose con cuidado. No quería presionarla, pero la preocupación era evidente en su tono.

Chaeyoung levantó la vista hacia él, sus labios temblaban ligeramente mientras intentaba encontrar las palabras adecuadas para explicar lo que sentía. Finalmente, soltó un suspiro pesado y comenzó a hablar, contándole a Sunoo lo que había presenciado entre Mina y Nayeon. Describió cómo la chica de aspecto de conejo le había acariciado la mejilla a la japonesa, cómo Mina se había abrazado a ella, escondiendo su rostro en el cuello de la otra chica. Cada palabra parecía dolerle más al decirla en voz alta, como si confirmar lo que había visto solo aumentara la herida.

Sunoo la escuchaba con atención, su rostro reflejaba preocupación y compasión. Cuando Chaeyoung terminó, él frunció el ceño, intentando comprender la situación por completo.

Sun:Espera, ¿qué pasó antes de que vieras eso? Quiero decir, algo debió desencadenar esta reacción en Mina, ¿no?

Chaeyoung se quedó en silencio por un momento, recordando los eventos que habían llevado a este punto. Lentamente, comenzó a narrar lo que había pasado en la habitación, cómo se había sentido nerviosa cuando la doctora había entrado para examinar su herida, y cómo, sin poder evitarlo, se había puesto tímida por la belleza de la mujer.

Sun:¡Por eso se enojó! Yo también me hubiera enojado.

Chae:No fue mi culpa.. es que... la doctora era realmente bonita. Me puse nerviosa, no pude evitarlo.

Sun:Vaya.. al parecer, Mina no lo vió así. Ella se ve que es muy posesiva, así que está muy celosa.

Chaeyoung asintió lentamente, reconociendo la verdad en las palabras de Sunoo. Mina siempre había mostrado un lado protector, incluso dominante en ciertos aspectos. Esa posesividad no era nueva, pero en esta situación, la había llevado a reaccionar de una manera que Chaeyoung no había esperado.

Chae:Supongo que tienes razón.. Mina siempre ha sido así. Pero aún así, duele. Lo que hizo con Nayeon fue mucho más grave que yo poniéndome tímida con la doctora, ¿no crees?

Sunoo inclinó la cabeza, pensando en cómo responder a eso.

Sun:Ambas están mal. Tú te dejaste llevar por un momento, pero Mina lo interpretó de la peor manera y respondió de forma impulsiva. Pero no puedes comparar las dos situaciones de esa manera. Lo importante es que hablen, que lo arreglen como las adultas que son.