¿Convertirse en el guía del villano misogino? ¡Absolutamente no!

Capítulo 64

“He oído que es repugnante. No puedes tomarlo estando consciente”.

“……”

“¿Por qué no te damos un sedante? Nosotros nos encargaremos de la intervención”.

Incluso Azir, ahora parte de su grupo intrigante, hizo un gesto hacia Oscar, tratando de convencer a Claude.

La medicación que lo guiaba, lo suficientemente repugnante como para dejar inconsciente a un elefante, era algo que Claude nunca había tomado estando consciente.

Mientras le administraban el medicamento, el rostro de Claude se contorsionó por la repugnante sensación.

—Ya te lo dije. Tómate el sedante, no seas terca.

"……Estoy bien."

Claude respondió con calma, a pesar de la lucha.

-No me importa. Ayúdame. Estoy bien.

Oscar no tuvo más remedio que ceder al ver a su amigo pronunciar con tanta indiferencia esas palabras tan poco habituales en él.

Claude soportó el disgusto y cerró los ojos.

No podía perderse este momento histórico.

Todo lo experimentaría vívidamente con sus propios ojos, con su propia piel.

Y cuando finalmente atrapó a su Guía…

Ese sería el momento…

***

Alguien dijo una vez que la vida es una serie de decisiones.

Los seres humanos se enfrentan a varias encrucijadas críticas a lo largo de su vida, donde una sola decisión puede alterar drásticamente el curso de la vida.

Es imposible tomar siempre decisiones sabias y deseables. A veces, uno puede tomar decisiones lamentables y tontas.

…Pero ¿podría haber una peor elección en mi vida que guiar en secreto a Claude?

“No llores, Rose Valentine”.

Claude, cruzando tranquilamente las piernas en el sofá, susurró. Su voz era tierna, como si estuviera consolando a un amante amado.

Pero ya no me dejaré engañar por Claude.

“Tienes los brazos caídos. ¿No deberías levantarlos correctamente de nuevo?”

"Uwaa ...

Claude me había puesto en una posición completamente humillante.

Estaba de rodillas frente al sofá donde estaba sentado Claude, ¡con los brazos levantados en señal de castigo!

¡Eso mismo que hoy en día ni siquiera obligarían a hacer a los niños de primaria, por considerarlo una violación de los derechos humanos!

Claude disfrutaba de mi vergonzoso estado como un depredador que juega con su presa antes de devorarla.

No importaba cuán dulce y tierna sonara su voz, las acciones que exigía eran descaradamente crueles.

“¿No tenemos mucho de qué hablar?”

“¿Qué, qué habladurías…”

"Usted debe saber…"

Toca, toca. Sus largos dedos, que habían rozado ligeramente mi mejilla como si estuviera tocando un piano, se deslizaron hacia abajo como una serpiente. Al llegar a mi cuello, su mano lo rodeó suavemente, como si me estuviera masajeando.

El agarre era débil, pero su mano era tan grande que abarcaba mi cuello por completo.

Con un poco más de fuerza, mi cuello podría romperse fácilmente.

Sentí escalofríos en el cuello.

"Lo, lo siento?"

"Eso no."

“¿Por favor perdóname?”

"Eso no."

—Entonces, ¿qué, hombre malvado…?

"……¿Hombre perverso?"

“Uwahhh, vete al infierno, hombre despreciable…”

Me dolían los brazos, que llevaba tanto tiempo en alto. Me dolían las rodillas de tanto arrodillarme.

El dolor y la miseria trajeron lágrimas a mis ojos.

¿No estaba funcionando correctamente la medicación que me estaba guiando? Todavía faltaban horas para que desapareciera su efecto, ¿no?

¿No tomó un sedante? No, no puede ser. La medicación es tan repugnante cuando uno está sobrio que la gente dice que si la toma así vomita en segundos.

Tenía miedo, no entendía qué había salido mal y me sentía totalmente agraviado.

Con lágrimas y mocos corriendo por mi cara, Claude me miró con lo que parecía un placer máximo.

—Bien, Rose. ¿Contamos quién es más perverso? ¿Tú, que me abandonaste mientras estaba cegado y ensordecido por un alboroto?

—Pero, pero fui yo quien detuvo ese alboroto…

“¿Poniendo el Salón de los Guías patas arriba mientras te escondes sin mostrar tu cara?”

“No, eso es porque tenía miedo…”

“¿Pretendiendo ser testigo y señalando a Oscar como mi guía? ¿Haciéndome tocar a Oscar? ¿Incluso instándome a besarlo?”

“……”

“Lo, lo siento…”